El Servicio de Atención a Víctimas de Violencia Intrafamiliar (SAVIF), creado hace 20 años por Gilberto Islas Cruz en colaboración con la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), tiene como objetivo brindar atención psicológica de manera gratuita a víctimas de violencia intrafamiliar, con problemas de adicciones y personas con tendencias suicidas; el servicio se puso en marcha para ayudar a disminuir los altos índices de violencia que se presenciaban en la ciudad.
SAVIF está destinado a toda la población que solicite ayuda psicológica, el apoyo proporcionado consiste en sesiones de psicoterapia (8-12 sesiones) impartidas por alumnos de últimos semestres y egresados de la Facultad de Psicología de la BUAP. El propósito de las sesiones es que las personas aprendan a resolver sus problemas emocionales por sí mismos en el menor tiempo posible.
Comenta Gilberto Islas Cruz, fundador del proyecto, que las situaciones más recurrentes a tratar son la depresión, ideas suicidas e intentos de suicidio, violencia intrafamiliar generalmente propiciada por el padre de familia, el abuso sexual intrafamiliar, y duelos por pérdidas amorosas, infidelidad y muerte. Asimismo, afirma que tan solo en lo que va del año han recibido a 1,082 pacientes, y gran parte de ellos son canalizados a través del DIF, el Instituto Poblano de la Mujer y la Procuraduría del Ciudadano, entre otros.
La ayuda que se otorga es totalmente gratuita, a su vez, los psicólogos colaboran de manera voluntaria, por lo que se trata de un servicio enteramente destinado a la sociedad. Lo anterior cumple con el objetivo de retribuir a los ciudadanos que pagan impuestos, ya que, explica Islas Cruz, “un buen porcentaje de lo que pagan los contribuyentes es desinado a la educación pública por lo que es necesario regresar el favor a la sociedad en forma de un servicio como el de SAVIF.”
Los horarios de atención son de lunes a viernes de las 9:00 a las 19:00 horas y sábados de las 9:00 a las 14:00 horas, y el único requisito es que los interesados acudan personalmente a las oficinas (3 Oriente #403, Centro Histórico de Puebla) para que proporcionen una serie de datos como su nombre completo, edad, ocupación, escolaridad, estado civil y procedencia, es decir, quién los canalizó y cómo se enteraron de la existencia del SAVIF.
Para Gilberto Islas, así como para los colaboradores, la mayor satisfacción es contribuir a que las personas que padecen trastornos psicológicos puedan retomar su vida en el menor tiempo posible “ver como un matrimonio pasó de ser una relación conflictiva a una relación pacífica y respetuosa, que una persona abandone la idea del suicidio, y que jóvenes abusadas sexualmente recuperen su seguridad, son de las mayores satisfacciones que deja esta labor” concluyó Islas.
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