Por: Psicoterapeuta Holística Claudia Puebla
La primera vez que me enfrenté al soltar y dejar ir a alguien fue cuando realmente sentí miedo, me paralicé y no sabía que hacer, ¿Te acuerdas tal vez cuando de pequeño perdiste algo?, pudo haber sido un juguete, un primer amor, un amigo o tal vez alguien importante en tu vida, que estoy segura de que tal vez sentiste lo mismo que yo.
El dejar ir nadie dijo que es fácil, en nuestros archivos de memoria está íntimamente ligado con sufrimiento, dolor, tristeza o abandono, esa energía de dolor se va registrando en tu cuerpo, en tu mente en tu archivo de memoria, con los años nos mostramos vulnerables ante la palabra “perder” algo o a alguien, nos recuerda que el duelo es igual a dolor.
Sin embargo, también me pongo a pensar en qué sucedió conmigo después de perder algo o alguien, nació una nueva versión de mí, más fuerte, más resiliente y cuando nace esa nueva fuerza es como si te salieran unas alas nuevas para volar más alto de dónde estabas.
Seguramente tú también has pasado por perdidas, tal vez estás transitando por el túnel de la incertidumbre, el dolor que implica perder a alguien, pero cuando estamos perdidos un rato en el túnel del dolor lo único que queremos es correr y salir de ahí, me parece que no solamente se trata de salir por huir del dolor, sino de salir de ahí llenos de gratitud, guardar en nuestra maleta personal todo el amor que nos entregaron, los mejores recuerdos y dejarlos volar para que sigan su proceso en otro rumbo u otras dimensiones, así mismo nosotros sacar nuestras alas que nos llevan a redireccionar nuestro rumbo.
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En todo cuento nos prometen ese arcoíris al final del túnel, y para poder alcanzarlo aquí te dejo un ritual que, sin duda, te ayudará. Este ritual puede ser tan profundo y liberador como tú quieras, realízalo con tiempo, dedicación, amor y respeto que tú te mereces.
Pasos para realizar un ritual que te ayuda a dejar ir a un ser querido que haya fallecido:
Antes de comenzar con el ritual consigue un espacio tranquilo, donde te sientas seguro y en paz, una vez que estés ahí, comienza.
1. Respira, realiza 8 respiraciones largas y profundas e imagina que esa respiración llega a tu estómago, muy probablemente las primeras respiraciones serán muy rápidas, pero cada vez ve alentando tu respiración, cada vez que respiras lentamente tu cuerpo se va relajando más y más.
2. Prende una vela, de preferencia de color morado que te ayudará a transmutar toda la energía que liberes en el ritual.
3. Abre tu corazón, para comenzar a despedir a alguien abre el corazón, para sacar viejos sentimientos de desesperanza, enojo, desamor, tristeza e intranquilidad.
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4. Escribe, nuestro mejor aliado es que comiences a escribir en una hoja blanca todo lo que se quedó guardado y no expresaste en su momento. Tal vez hubo sentimientos o pensamientos que le hubieses querido decir a ese ser que partió, es momento de escribirlos.
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5. Atención con la emoción, observa tus sentimientos, escucha también a tu cuerpo, presta atención a todas las alertas que él envía, date cuenta de esas sensaciones que sientes, no las juzgues simplemente vuélvete un observador de tu mismo cuerpo.
6. Agradece, al final de escribir todos los sentimientos que se quedaron guardados, escribe y contesta las siguientes preguntas, ¿Qué te enseñó esa persona?, ¿Qué le agradecerías?, ¿Qué hubieses cambiado de ti para mejorar su relación?, ¿Qué momentos positivos guardarías de esa relación? Nadie va a leer tus respuestas, responde con naturalidad.
7. Imagina a esa persona enfrente de ti y vas a leer la carta en VOZ ALTA, deja que las emociones fluyan de ti, sin juzgarlas como buenas o malas.
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8. Libera todas las emociones que no te de miedo sentir, recuerda que eres humano que tiene emociones, pensamientos y el llorar es también liberador.
9. Quema la carta, es un paso muy importante, ya que al quemar algo automáticamente nuestro inconsciente entiende que se destruye, energéticamente el fuego nos ayuda a transmutar la energía y liberarla.
10. Libera las cenizas, en el parque, una maceta, en el mar o simplemente deja que las cenizas se las lleve el viento, mientras vacías las cenizas puedes decir “te entrego y te libero”.
Soltar es un acto de valentía, soltar es liberador, soltar abre nuevas puertas, pero cuando sientas que no lo puedes hacerlo solo buscar ayuda es un gran acto de amor propio.
Claudia Puebla
Psicoterapeuta Holística
Instagram: @clau.puebla
Facebook: Claudia Puebla
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