Un estudio reciente del American Journal of Clinical Nutrition revisó la efectividad de un plan alimenticio en más de mil 200 personas con sobrepeso y obesidad en España para saber qué estaban haciendo mal al intentar bajar de peso.
Los resultados mostraron que aquellos con una variación genética específica de la proteína perilipina, esencial para quemar grasa en todo el cuerpo, perdieron menos peso si comían después de las tres de la tarde que aquellos que comieron antes.
A pesar de que el estudio se enfocó en personas con un perfil genético específico, un estudio similar publicado en el International Journal of Obesity en 2013, que demuestra que comer tarde está asociado con menor éxito para perder peso, sin importar las variaciones genéticas.
De acuerdo con Men´s Health lo interesante es saber por qué la hora de comida afecta en la pérdida de peso. La doctora Marie-Pierre St-Onge, profesora en la Universidad de Columbia e investigadora del impacto del comportamiento en el control del peso en el Centro de Investigación sobre la Obesidad y la Nutrición en Nueva York, hace una comparación entre como el ritmo circadiano controla el que tengamos sueño, pasa lo mismo con el hambre.
“El metabolismo es distinto en cada individuo y la hora en la que consumes tu comida en relación con tu ritmo circadiano puede influir en la pérdida de peso”, explica.
El ritmo circadiano también controla la secreción de insulina del cuerpo, añade. Si comes a una hora en la que el cuerpo es menos sensible a la insulina, puede que te sea más complicado perder peso.
La hora de comida sí influye en el tamaño de la cintura, pero no hay relación entre el peso y la hora de la cena o el desayuno, según las investigaciones.
De hecho, la gente que hace comidas más grandes puede tener una ventaja: pues otros estudios señalan que la gente que tiene la comida como alimento principal del día pierde más peso y tiene un índice de masa corporal menor.
“Si ves cómo comemos en América, notarás que se comen pocas calorías en el desayuno y la comida. Si sumas la ingesta calórica del desayuno y la comida, tendrás más o menos el 40 por ciento de las calorías que consumes en el día y la cena y tus snacks representan el otro 60 por ciento”, agrega.
Si tienes algunos problemas para perder kilos, una buena idea es hacer de la comida la ingesta caloríca más importante del día.