Descansar correctamente es esencial para sentirnos bien físicamente, pero también para preservar nuestra salud cerebral y psicológica. Dormir poco trae consecuencias a largo plazo que desde ahorita podemos evitar.
Un estudio revela que tener pocas horas de sueño al día aumenta la posibilidad de desarrollar demencia tardía, es decir, durante la vejez. En la mediana edad lo ideal es ser constantes y estrictos también con nuestro descanso, pues esto puede marcar la pauta sobre la calidad de vida que tendremos hacia el final de nuestros días.
Para su investigación, científicos de la Universidad de París revisaron los datos registrados de 9,759 personas del Reino Unido, desde 1985. Entre la información recabada en los últimos 36 años, se encuentran las horas que cada uno le dedica al descanso.
Los expertos encontraron que las personas entre 50 y 70 años que dormían menos de seis horas por la noche, mientras atravesaban la mediana edad, tenían un 30% de mayores probabilidades de desarrollar demencia de inicio tardío.
En resumen, su conclusión es que dormir menos de seis horas al día repercute de forma directa en la salud mental de las personas.
Los autores del estudio precisaron que uno de los síntomas de la demencia es el sueño alterado, pero que existe evidencia de que los patrones de sueño antes de la aparición de este trastorno, pueden contribuir a la enfermedad.
(Foto: Pixabay)
Descubrieron que la demencia afecta los ciclos de sueño y vigilia, pero tenían claro hasta qué punto la duración del sueño en la edad adulta se asociaba a la demencia. Esto, porque la mayoría de los estudios no han considerado explícitamente la edad en la evaluación de la duración del sueño.
“Nuestro enfoque presta atención a ambos aspectos junto con la inclusión de una amplia gama de variables para mostrar que la corta duración del sueño en la mediana edad se asocia con un mayor riesgo de demencia”, explicó Severine Sabia, quien encabeza al grupo de científicos.
Se sabe que durante el sueño, las toxinas se eliminan del cerebro y otras partes del cuerpo, lo que protege contra una serie de enfermedades, incluidas los padecimientos cardíacos y el cáncer.
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Si dormir poco nos puede llevar a padecer demencia, es lógico pensar que dormir mucho ayudaría a revertirla. En este caso, los expertos admiten que no tienen cómo responder a esto, pero piden a las personas intentar domir, al menos ocho horas, por salud.
Además, ya trabajan en una nueva investigación que podría ayudar a determinar si acumulando más horas de sueño se podrían evitar este tipo de afecciones cerebrales.
La científica Severine Sabia, destaca que el sueño es parte esencial para la salud del cerebro y que una investigación futura podría establecer si la mejora en los hábitos de descanso podría prevenir la demencia.
Con información de Daily Mail
Te compartimos este video sobre las consecuencias de la falta de sueño: