Si has tenido una de esas pláticas con tu amigo doctor, una de esas charla donde te das cuenta que todo en este mundo te causará, tarde o temprano, una muerte dolorosa y lenta, esto es más o menos lo que le pasó en esta ocasión a esta reportera.
Habrá que ser honestos, y decir que lo primero que hice al llegar a la conferencia de prensa para el Día Mundial del Lavado de Manos, que se celebra este 15 de octubre, fue evitar la prueba donde una edecán te muestra que todo lo que sabes sobre lavarte las manos, es un error. Y esta es la prueba:
Las líneas de puntos blancos que sobresalen en la luz violeta, son gérmenes y hay que decir que ninguna de las personas que hizo la prueba ¡la pasó! Por supuesto todos asegurábamos lavarnos las manos de forma adecuada.
El Día Mundial del Lavado de Manos nos hace pensar en la fragilidad de la higiene, pues todos los sitios que tocamos están sucios, incluido nuestro propio cuerpo, por ello es necesario aumentar las medidas y las veces en que nos aseamos, pues la incorrecta forma de este procedimiento es el causante de enfermedades, de infecciones, virus y bacterias que se transmiten contagiosamente cada vez que saludamos a nuestros compañeros de trabajo, tocamos nuestro rostro o tocamos el tubo del Metro.
La conferencia para la celebración y concientización de este hábito fue organizada por Tork, y tuvo como voceros a Joaquín Sordo, Director Comercial Away From Home de México y Centroamérica de SCA y el Dr. Antonio Arista V, pediatra infectólogo y profesor titular de infectología de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); ambos compartieron sus conocimientos sobre la importancia del lavado de manos.
Para empezar hay que decir que la forma en que nos lavamos las manos es incorrecta pues no le dedicamos el tiempo adecuado para hacerlo, que debería ser un minuto en promedio. Así lo dijo el Dr, Arista: “Las vacunas salvan vidas, inclusive más que los antibióticos, pero ¿saben qué es mejor? El lavado de manos y la sanidad del agua potable. Es mejor lavar las manos con cuidado y potabilizar el agua; esta es la práctica más antigua de control y reducción de infecciones y enfermedades, es también la más barata.”
Todo comenzó con Ignaz Philipp Semmelweis, un médico húngaro que se conoce como el descubridor de los procedimientos antisépticos, entre ellos el lavado de manos.
“El demostró que lavándose las manos se podían infectar menos los pacientes. En los hospitales de la época, las mujeres tenían el mismo riesgo de morir cuando daban a luz ahí que si lo hacían en su casa, porque los médicos no se lavaban las manos, pues de todas maneras se iban a ensuciar." nos explicó el Dr. Arista.
El especialista recordó lo que vivió México en 2009 con la influenza, una epidemia que pudo haber sido peor: “En la epidemia de influenza de 2009 se registraron muchos muertos, pero no alcanzó los niveles que pudo haber alcanzado, debido sobre todo, a que se aumentaron las medidas de higiene, todos nos lavábamos las manos.”
Por su parte Sordo recalcó el compromiso de Tork con la higiene: “El lavado de manos se relaciona con la práctica de prevención y control de padecimientos, es una forma de evitar infecciones y daños a la salud. Desde 2006, Tork®, líder mundial en sistema de higiene en el segmento Fuera de Casa (Away From Home AfH, por sus siglas en inglés), responde a las necesidades de higiene, calidad e imagen con soluciones eficaces basadas en tecnología innovadora que favorece el uso de menos papel al igual que el menor contacto con superficies para evitar la contaminación cruzada.”
Es importante saber que uno de los sitios más contaminados de nuestro cuerpo para que en él habiten y se reproduzcan las bacterias es la piel, el lugar ideal para que se propaguen las bacterias, por ello es importante el número de veces que nos tocamos la cara y que nos lavemos las manos constantemente.
La forma correcta de lavar las manos
1. Mojar las manos.
2. Aplicar jabón líquido, o en espuma.
3. Tallar hasta formar abundante espuma.
4. Masajear vigorosamente durante 20 a 30 segundos.
5. Frotar por completo la superficie, incluyendo la parte trasera de las manos, muñecas, entre los dedos, y debajo de las uñas.
6. Enjuagar bien las manos.
7. Secar con una toalla limpia, de preferencia de papel.
8. Cerrar la llave, preferentemente con la misma toalla que secaste tus manos.
Durante la conferencia, el Dr. Arista nos dio algunos datos impresionantes sobre el lavado de manos y te invitamos a que les eches ojo.