Para la mayoría de las personas, recibir el diagnóstico de alguna enfermedad crónica como cáncer, puede ser duro e impactante. Se trata de un momento difícil donde es natural experimentar sentimientos de incredulidad, miedo, depresión y enojo que, muchas veces, requiere apoyo psicológico y comprensión parte de amigos y familiares.

Si bien cada persona lo enfrenta a su modo, es importante que cuente con toda la información para saber cómo iniciar una atención médica oportuna y adecuada, dijo Tim Daveler, co-fundador de , una empresa que mediante una membresía conecta a los pacientes con una red de médicos expertos en un lapso de 24 horas y sin lista de espera.

Este servicio se conoce como Medical Concierge y recientemente abrió sus puertas en México para atender las necesidades de salud de la población que requiere asesoría profesional en el país o Estados Unidos.

Lamentablemente, con frecuencia la gente no sabe cómo manejar un diagnóstico negativo, lo que hace más complicado el proceso de recuperación y cura. Ante ello, Daveler compartió algunos consejos que ayudarán al paciente a asimilar la situación:

1. Conoce tus derechos. El paciente tiene derecho a que el médico tratante le brinde información completa sobre el diagnóstico, pronóstico y tratamiento de manera clara y directa. También aceptar o rechazar cada procedimiento terapéutico y participar del mismo.

[[{"type":"media","view_mode":"media_original","fid":"18469","attributes":{"alt":"","class":"media-image","height":"500","style":"display: block; margin-left: auto; margin-right: auto;","width":"500"}}]]

2. Si tienes dudas, busca una segunda opinión. Todos los médicos son seres humanos susceptibles a cometer errores y hacer un diagnóstico alejado a una solución satisfactoria. Un Medical Concierge puede ser un buen aliado cuando no sabes con quién recurrir, si necesitas video consultas o una segunda opinión antes de tomar una decisión con respecto al tratamiento.

3. Vigila tus pruebas y estudios clínicos. Es importante llevar un control de las pruebas y análisis. Intenta que estén lo más pronto posible para que el médico pueda empezar el tratamiento indicado a tiempo.

4. Asiste acompañad (a) a las consultas. En el momento de estar frente al especialista, los nervios pueden ser un factor de  bloqueo para entender las explicaciones. Como dice el refrán, “dos cabezas son mejor que una”.

5. Prepara tus preguntas. A veces las consultas médicas pueden ser cortas y dejarte con dudas. Te sugerimos lleves anotadas todas tus preguntas y exponlas sin vergüenza; de esa manera, podrás tener una mejor idea de tu situación.

6. Consultar en Internet tienes sus riesgos. En Internet abunda la información sobre cualquier tipo de enfermedad y muchas veces no sabemos cómo discriminarla. Hay fuentes especializadas y acreditadas sobre muchos temas, aunque la voz de tu médico es la que debería importar en primer término.

[[{"type":"media","view_mode":"media_original","fid":"18470","attributes":{"alt":"","class":"media-image","height":"500","style":"display: block; margin-left: auto; margin-right: auto;","width":"500"}}]]

Google News

TEMAS RELACIONADOS