Fumar es uno de los hábitos más difíciles de dejar, que no solo afecta la salud, especialmente a los pulmones, también la economía y, en algunos casos, trae problemas con la familia, por lo que cada día es un buen momento para dejarlo.
Aunque sabemos que es más fácil decirlo que hacerlo, centenas de personas en todo el mundo lo han logrado, demostrando que, así como ellos, tú también puedes. Con decisión, persistencia, ayuda de tu círculo más cercano y teniendo claro tu objetivo, dejarás el cigarrillo por completo.
Si estás leyendo esto, lo más probable es que ya te decidiste o comenzaste a pensar en dejar el cigarro y mejorar tu estado de salud, por eso en De10.mx te enlistamos 10 consejos para dejar de fumar, recuerda que es un proceso largo y que está bien si fallas la primera vez, siempre y cuando no dejes de intentar… ¡Tú puedes!
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¿Para qué quieres dejar de fumar? Puede ser para cuidar tu salud, proteger a tu familia del humo que exhalas o ahorrar un poco de dinero. Cuando respondas esa pregunta, sabrás el porqué de tus esfuerzos para dejar de fumar.
Fumar es adictivo y tu mente y cuerpo querrán la nicotina desesperadamente. Ten en cuenta que sufrirás el síndrome de abstinencia, por lo que es muy importante buscar apoyo antes para que estés preparado.
Informa a los demás que estás dejando de fumar, para que eviten invitarte un cigarrillo o te apoyen cuando estés a punto de caer en la tentación.
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La nicotina otorga una sensación relajante, por eso necesitarás encontrar otras maneras de sentirte relajado. Puedes probar con música, encontrar un pasatiempo o comenzar una actividad física.
Una noche de copas te puede llevar fácilmente a perder la cordura y caer en el tabaquismo. Si acostumbrabas a fumar y tomar café o después de las comidas, cambia la bebida por agua, té y busca otra cosa qué hacer, como ver una serie, leer, un curso, cocinar... las posobilades son infinitas, no te detengas.
Escuchar la experiencia de los demás siempre será de ayuda. Aunque recuerda que cada proceso es único y lo que le funcionó a los demás, no puede servirte a ti.
Limpia la ropa que huela a cigarro, lava las cortinas, sillones y demás artículos que tengan el mismo olor. También tira los ceniceros y mecheros.
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Quizá llevas años fumando uno, dos o hasta cuatro cigarrillos al día. Para que no te provoque tanta ansiedad, puedes comenzar reduciendo la cantidad de ellos, hasta que un día llegues a cero.
Si te quedas sentado, únicamente pensando en que NO debes consumir tabaco, será más difícil para ti. Encuentra una actividad física que te guste, para reducir tu deseo de fumar. Si eres un sedentario, puedes escribir, hablar por internet con otros en tu misma situación o hacer labores domésticas.
Cada vez que sientas que la necesidad de fumar es más fuerte que tú, recuerda la razón que encontraste al inicio para dejar tu adicción. No necesitas la nicotina para poder vivir, piensa en todos los beneficios que conseguirás al dejarla.
Con información de: Grupo laberinto
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