En México, 7 de cada 10 perros que viven en la calle alguna vez tuvieron un hogar. Desgraciadamente muchas de las personas que deciden tener una mascota no están conscientes de que, además de traer felicidad a su hogar, es una gran responsabilidad. No creerías las excusas más tontas por las que algunos dueños deciden echar a su perro a la calle. Aquí mencionamos algunas.
1. Se hace caca por todos lados
Definitivamente enseñarle a tu cachorro a hacer en el lugar correcto no es una tarea fácil, pero si le dedicas el tiempo y la paciencia en tres días lo aprenderá bastante bien. Recuerda que los aprendizajes y la personalidad de tu perro dependen de tu disposición como dueño.
Si tu perro es mordelón o le gusta destruir todas tus cosas, no tiene nada que ver con el cariño que siente hacia ti. Más bien, es probable que tu perro necesite más atención de la que le estás dando.
Típico, quieres salir de vacaciones pero sientes que tu perro no puede acompañarte o que es demasiado complicado llevarlo. La verdad es que existen muchos planes que pueden hacer juntos o, si de plano no hay manera, siempre lo puedes dejar en una guardería de confianza.
Es importante que todos los días contemples las necesidades de tu perro tanto en tu tiempo como en tu economía. Asegúrate de ahorrar en fechas costosas para que nunca le falte nada. Asimismo, hay razas que te pueden ayudar a cuidar tu dinero.
Ésta es una de las principales causas de abandono de perros. No regales ninguna mascota porque es muy probable que esa persona termine sin tener el tiempo para cuidarla.
No crees que si tu perro ladra todo el día, ¿intenta decirte algo? Hay formas de enseñarle a no ladrar, pero también vas a tener que cambiar algunos hábitos tuyos que están causando esta actitud en él.
A los perros hay que quererlos como son, pero si no tienes mucho espacio, asegúrate de elegir a uno que no crezca tanto.
Si tu perro está sucio, es porque tal vez no lo bañas lo suficiente. Sabemos que a veces no hay tiempo o que el clima no te lo permite, pero hay maneras fáciles de mantener su higiene y asegurarte de que además tenga un pelo increíble.
Mudarte con tu perro no es nada del otro mundo si sabes cómo hacerlo. Recuerda que él es parte de la familia desde el día en el que decidiste tenerlo, así que a donde vayas tú, él irá también.