En nuestra imaginación, todos los gatos son como Garfield, adorables, astutos y... perezosos. La obesidad felina es un problema muy común en las mascotas y Bronson lo sabe bien ya que pesa ¡14 kilos!

Mike Wilson y su novia Megan Hanneman se dedican a hacer muebles para ejercitar gatos. Como parte de su trabajo, necesitaban conseguir mininos para probar sus invenciones. La pareja acudió al refugio más cercano y conoció al gigantesco y gentil gato Bronson.

Wilson y Hanneman lo adoptaron de inmediato y comenzaron la dura tarea de ponerlo en forma. Bronson, como casi el 60% de los gatos domésticos tiene obesidad y por muy adorable que sea, su cuerpo podría estar sufriendo.

La obesidad gatuna está vinculada a enfermedades como la diabetes, padecimientos renales y condiciones en la piel. Además los animales con sobrepeso pueden sufrir artritis por el esfuerzo extra que hacen sus articulaciones para sostenerlos.

El gato doméstico promedio pesa entre 3.6 y 5.4 kilos, pero esto varía dependiendo de la raza y el sexo. En un gato de peso normal se pueden sentir ligeramente sus costillas al tocar el costado de su cuerpo, mientras que en uno con peso de más, sólo se siente carne.

Además de la falta de ejercicio, los felinos se ven afectados por la mala dieta a la que son sometidos por sus dueños. Normalmente los gatos son carnívoros, por lo que consumen mucha proteína y pocos carbohidratos. Sin embargo, el alimento comercial tiene un contenido más alto de carbohidratos, lo cual desequilibra su organismo.

Dejar al gato con acceso permanente a la comida o ceder a sus ruegos falsos puede provocar que el animal coma de más. Compartir los alimentos con nuestra mascota tampoco es aconsejable, ya que no sólo le damos calorías extra, sino que podrían enfermar del páncreas e intestinos al comer sustancias que son tóxicas para ellos.

Incluso el viejo mito de darles leche puede actuar en su contra, ya que la mayoría de los gatos ADULTOS son intolerantes a ella, por lo que puede generarles un problema grave.

En el caso de Bronson, su dueño anterior falleció. Por el rápido ritmo al que Bronson engordó, ya que sólo tiene 3 años, se cree que su dueño era una persona mayor que lo alimentaba de sobras de comida.

Si bien muchos podrían creer que basta con poner a dieta a nuestros gatos para combatir este sobrepeso, la realidad es más complicada. Los gatos obesos deben perder kilos de manera lenta, o podrían tener afectaciones mortales en el hígado.

Por suerte, Bronson está en manos expertas. Sus dueños han adaptado su dieta para que consuma sólo 375 calorías diarias, en alimentos saludables. Aunque aún no puede bajar las escaleras ni saltar, Bronson se ejercita jugando y caminando diariamente. Sus propietarios incluso han tenido que adaptar una almohada para cargarlo, debido a que es demasiado pesado y no puede recorrer largas distancias.

Para compartir la experiencia ayudando a Bronson, sus dueños crearon una cuenta de Instagram donde el felino ya acumula 13 mil seguidores. Aunque aún queda un largo camino para que este minino tenga una vida saludable, Mike y Megan están dispuestos a ayudarlo a cada paso.

Con información de y

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