Salvador Dalí es uno de los artistas españoles más recordados en la historia. Se distinguió por estar envuelto en una vida polémica, no porque en sí fuera un personaje así, más bien porque su forma de vida lo hacía extravagante en comparación con otros.
De acuerdo con Muy Interesante, Dalí se ha convertido en un referente mundial de la pintura surrealista, pero su imaginación, creatividad y paranoia no se quedaba en el lienzo, sino que envolvió su vida de principio a fin.
Según datos de Batanga, las excentricidades que Dalí protagonizó, son bien conocidas, pues lo convirtieron en un artista que siempre sobrepasaba los límites, que debía sobresalir. Pocos saben que vivió convencido de que era la reencarnación de su hermano, fallecido poco antes de su nacimiento.
Dalí nació el 11 de mayo de 1904 y falleció el 23 de enero de 1989. Sus declaraciones, tanto como las entrevistas que hacía reflejan su visión sobre la vida, el arte y guardan un lugar especial para su locura, fundamental para entender a un personaje de su talla.
De acuerdo con información de su página oficial, a principios de la década de los treinta, fue cuando Dalí halló su propio estilo, su lenguaje y la forma de expresión que lo hicieron especial. Su arte se define como una mezcla de vanguardia y tradición. Dalí es fundamental en la corriente surrealista en donde se consagró como pintor.
Este es un recuento de algunas de sus mejores frases en las que se puede ver la forma de pensamiento y reflexión que lo hacen la “vaca sagrada” que es hoy.
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