Pattie Boyd era la mujer más codiciada de la Era de Oro del Rock and Roll. Su belleza puso de rodillas a George Harrison y a Eric Clapton e inspiró a ambos a escribirle varias de las mejores canciones de amor de la historia. Pero detrás de este rostro inocente se esconde la historia de una talentosa fotógrafa dispuesta a dejar muy claro que es mucho más que una musa.
Patricia Anne Boyd nació el 17 de marzo de 1944 en Somerset, Inglaterra, pero pasó la mayor parte de su infancia en Kenia con su padre, Jock. La madre de Pattie, Diana, venía de una acaudalada familia y se enamoró de inmediato de Jock, quien era un atractivo piloto militar. El matrimonio era feliz hasta que el piloto sufrió un accidente que lo dejó desfigurado y deprimido.
Entonces Diana tomó a sus seis hijos y se separó de su marido, sólo para rápidamente encontrar un reemplazo. Pattie nunca se llevó bien con su padrastro, quien a menudo quemaba el cabello de la niña como broma pesada. A los 17 años, Patricia decidió dejar la escuela y comenzó a trabajar en una estética.
El destino quiso que una de las clientas del salón notara la belleza de aquella chica y la recomendara con una agencia de modelos. La vida de Pattie dio un vuelco de 360 grados a partir de ese momento y rápidamente su carisma le ganó pasarelas y sesiones de fotos en Nueva York, Londres y París, así como portadas tan importantes como la de la revista Vogue.
El estilo personal de Pattie rápidamente conquistó el mundo de la moda. (Foto: Instagram @pattie.boyd_)
De la noche a la mañana, la joven pasó a ser una estrella y, naturalmente, el siguiente paso era entrar a la pantalla grande. En 1964, Pattie consiguió un pequeño papel en la cinta de The Beatles, A Hard Day's Night. Durante el rodaje la modelo de inmediato se sintió atraída al miembro más retraído del Cuartero de Liverpool, George Harrison.
El Beatle también fue flechado por la belleza de Boyd y de inmediato le pidió matrimonio, a pesar de que ella salía en ese momento con el fotógrafo Eric Swayne. Ella rechazó inicialmente al músico, pero Pattie finalmente rompió su relación con Swayne y comenzó un romance legendario con Harrison.
En aquella época, The Beatles eran muy unidos y Pattie los introdujo al yoga Maharishi, con la esperanza de que redujera su consumo de drogas y alcohol. La relación con Harrison se hizo cada vez más intensa y llegó al altar en enero de 1966, con Paul McCartney como padrino. Más enamorado que nunca, George le compuso a su esposa Something en donde le declaraba: “En algún lugar de su sonrisa ella sabe que yo no necesito otra amante”.
Harrison también escribió 'I need you' inspirado en su amor por Boyd. (Foto: Instagram @pattie.boyd_)
Pero era mentira, porque Harrison tuvo múltiples aventuras durante su matrimonio e incluso le confesó a Ringo Starr que estaba enamorado de su esposa, Maureen. Poco a poco, el carácter del 'Beatle callado' comenzó a cambiar debido al uso de drogas y Boyd comenzó a distanciarse.
La pareja vivía en su propia burbuja dentro de la lujosa mansión de Friar Park con 120 habitaciones. Harrison pasaba la mayor parte de su tiempo en el estudio y en los pocos ratos libres que tenía se refugiaba en los ocho jardines de la propiedad, mientras Boyd se quedaba sola. La vida del matrimonio estaba sometida al aislamiento, ya que la radio y los periódicos estaban prohibidos en la casa y el músico no permitía a su propia esposa tomar flores de su jardín, por lo que tenía que comprarlas fuera.
Un día, una misteriosa carta llegó a las manos de Boyd, firmada sólo con la letra E. Era la declaración de amor escrita por Eric Clapton, uno de los amigos más cercanos de Harrison. Clapton había estado enamorado de Pattie por años y para ella escribió Layla, una de las canciones más famosas de su discografía. La letra dice: “Traté de consolarte cuando tu viejo hombre te decepcionó. Como un tonto, me enamoré. Mi mundo se puso de cabeza”.
Inicialmente Pattie se negó al cortejo de Clapton, ya que este era adicto a la heroína y la joven estaba harta de vivir con un drogadicto. Pero Eric se rehabilitó como prueba de su devoción y finalmente en 1974, la modelo dejó a Harrison por su nuevo amor. Tres años después, la separación con el Beatle se hizo oficial y se firmaron los papeles del divorcio.
Clapton también escribió la letra de 'Wonderful Tonight' para Pattie mientras esperaba a que ella se arreglara para salir juntos una noche. (Foto: Instagram @pattie.boyd_)
En 1979, Pattie regresó al altar de la mano de un músico, y Clapton se casó con la chica de sus sueños. Boyd pensó que finalmente había encontrado a su media naranja, pero la realidad rápidamente destruyó la ilusión de la joven, porque Clapton había reemplazado la heroína con el alcohol y era igual de infiel que Harrison.
Durante casi una década Pattie y Clapton vivieron una tormentosa relación hasta que en 1986 el músico le confesó que se había enamorado de una modelo italiana, quien esperaba un hijo de él. Con el corazón roto, Pattie de 42 años, trató de embarazarse por medio de inseminación in vitro, pero el procedimiento no tuvo éxito.
La modelo dejó a su segundo esposo y tuvo que valerse por si misma. Para Pattie era incluso novedoso viajar en transporte público, ya que había perdido su licencia por conducir alcoholizada. Boyd había pasado la mayor parte de su vida frente a las cámaras, pero para ganarse la vida, tuvo que cambiar de lado y comenzó su carrera como fotógrafa de viajes.
Boyd conoció a Rod Weston en 1986, sin saber que años depués se enamoraría perdidamente por tercera vez. (Foto: AP)
Esta nueva Pattie no estaba dispuesta a vivir a la sombra de otro ídolo de la música y pudo haberse resignado a la soledad. En lugar de eso, a los 71 años, decidió darle una nueva oportunidad al amor. Rod Weston había conocido a la modelo a finales de la década de los ochenta, pero ella estaba deslumbrada por el amor de Clapton y no le hizo mucho caso al empresario.
Pero no todo estaba perdido, porque Pattie y Rod se reencontraron y la chispa surgió de nuevo con tanta intensidad que en 2015, la mujer que pasó su vida recorriendo pasarelas, caminó por tercera vez al altar, esta vez en una ceremonia modesta y elegante con pocos invitados.
Desde entonces, Pattie se encuentra (aparentemente) felizmente casada y esta dedicada a su pasión como fotógrafa. Por fin parece que la musa rockera ha encontrado paz en su vida, pero sólo el tiempo dirá si la tercera es la vencida para el corazón de Pattie Boyd.
Con información de Telegraph, The Morton Report y The Vintage News
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