Para muchos Lady Gaga es una inspiración, arriba y debajo del escenario. Además de tener una envidiable colección de Grammy, Golden Globles y hasta una nominación al Óscar, la cantante ha usado las tragedias en su vida para nutrir su talento.
El nombre verdadero de Lady Gaga es Stefani Joanne Angelina Germanotta, quien en 2008 lanzó su álbum debut, The Fame; con él alcanzó la cima de los conteos musicales y se lanzó a la fama internacional.
Además de su trayectoria musical, Stefani Germanotta ha incursionado con éxito en la actuación. En 2015 ganó un Golden Globe por su participación en la serie de horror American Horror Story: Hotel. El año pasado, Lady Gaga protagonizó A star is born (Nace una estrella) junto a Bradley Cooper, papel que la llevó a ser nominada al Óscar de Mejor Actriz.
Para celebrar el cumpleaños de esta gran estrella, este 28 de marzo, te presentamos los 10 mayores obstáculos que Stefani superó para convertirse en Lady Gaga:
Desde muy joven, Lady Gaga tenía un estilo muy particular que la hacía distinta al resto. Esto impulsaría su carrera más tarde, pero también la hizo blanco fácil del acoso escolar. De hecho, cuando asistía a la universidad NYU, sus compañeros crearon un grupo de Facebook bautizado: Stefani Germanotta, nunca serás famosa.
Desde muy joven Lady Gaga fue adicta a varias sustancias, pero su punto crítico llegó al inicio de su carrera, cuando comenzó a usar cocaína. A diferencia de otras estrellas que caen en la tentación durante las fiestas, Lady Gaga consumía la droga a solas en su departamento, cuando se ponía a escribir las letras de sus canciones.
La cantante confesó que cuando tenía 19 años, un productor musical la violó. En aquel momento, Stefani Germanotta decidió no contarle a nadie. “Fue casi como si lo intentara borrar de mi memoria”, dijo la estrella, quien en 2015 escribió la canción Till it happens to you, donde habla del abuso sexual en las universidades.
A raíz de la violación, Lady Gaga desarrolló estrés post traumático. “Sentía que le estaba mintiendo al mundo porque sentía tanto dolor, pero nadie lo sabía”, declaró en una entrevista.
En septiembre de 2017, Lady Gaga anunció que sufre fibromalgia, una condición que provoca dolor crónico. Su lucha contra este padecimiento quedó retratada en el documental de Netflix, Gaga: Five Foot Two.
Lady Gaga conoció al actor Taylor Kinney mientras grababa el video para su tema You & I, en 2011. En 2015 la pareja se comprometió, para separarse un año después.
En 2017, Gaga se comprometió con su representante, Christian Carino. A pesar de que todo parecía ir sobre ruedas, la pareja se separó en 2019, poco antes de los Óscar, donde vimos a Gaga cantar con Bradley Cooper.
En 2016, Lady Gaga lanzó su quinto álbum, Joanne. El disco está inspirado en su tía, quien murió a los 19 años, antes de que la cantante naciera. A pesar de nunca haber conocido a Joanne, Gaga declaró que se había inspirado en el espíritu rebelde de su tía para escribir las canciones de este disco.
La cantante ha declarado que cuando tenía 15 años padeció de bulimia y anorexia. En la secundaria solía provocarse el vómito porque quería lucir como una esbelta bailarina. En redes sociales, Lady Gaga ha pedido a sus fans “compasión” y se defiende de quienes critican su imagen.
Cuando inicio su carrera la confundían con Amy Winehouse. Por esta razón, decidió cambiar su cabello castaño natural por un tono rubio. Sin embargo, el efecto de los químicos en su melena hizo que comenzara a perderla, hasta llegar al punto en el que dijo necesitar “un corte de cabello químico” para contrarrestar los efectos.
Lady Gaga es abiertamente bisexual e incluso tiene un alter ego masculino, cuyo nombre es Jo Calderone. Al inicio de su carrera, su estilo levantó rumores sobre su orientación sexual y género, pero hoy esas controversias están sepultadas en el olvido.
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