Cada vez que Hollywood necesita una persecución en motocicleta, éste es el hombre al que llaman. Jean Pierre Goy, un francés que vive alejado de los reflectores, es el responsable de las mejores escenas de acción que hemos visto en pantalla.
Este motociclista extremo realizó las secuencias más arriesgadas de The Dark Knight Rises, The Bourne Legacy y Skyfall. Sin embargo, cuando Jean fue con su familia a ver la cinta de Batman, nadie lo reconoció.
El francés es una leyenda en el mundo de los dobles de acción, ya que es el único capaz de manejar la Batpod, el vehículo de dos ruedas usado por Batman en la saga de Christopher Nolan. La impresionante motocicleta, con un peso de 500 kg. y una velocidad mayor a los 120 km/hr, no es apta para ser conducida por cualquiera.
Gracias a su destreza sobre las dos ruedas, Jean Pierre Goy ganó el premio Taurus 2009, reconocimiento entregado a los mejores dobles de acción de la pantalla grande. Nolan lo volvió a buscar, esta vez para participar en Inception.
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Además de ser doble, Goy trabaja como camarógrafo especializado en persecuciones de alto riesgo. Fue él el encargado de seguir a Leonardo DiCaprio en Inception, pero también a trabajado en Captain America: First Avenger (2011) y Knight and Day (2010).
Incluso se dio a la tarea de meterse en la piel de un hombre lobo para Wolfman (2010). Como encargado de cámara, Pierre manejaba el lente de tal manera que la audiencia sentía que estaba en la perspectiva del monstruo.
A pesar del estereotipo de los dobles como amantes de la adrenalina, Jean Pierre se ha ganado fama como calculador y disciplinado. Para The Dark Knight Rises ensayó durante cinco meses y medio las maniobras de una secuencia que duró sólo seis minutos en pantalla.
Pero mucho antes de Batman, Jean Pierre ya se había estrenado con el personaje de James Bond. Luego de fundar en 1992 su propia compañía productora, Goy recibió la oportunidad de doblar las escenas de Pierce Brosnan para 007: El mañana nunca muere.
En esta cinta, el director había planeado que el 007 saltara en una moto desde un helicóptero. Aunque la producción insistía en que Goy se sujetara de un cable, Jean Pierre se negó y practicó más de 200 veces el salto antes de ejecutar un brinco perfecto entre dos edificios de Bangkok, Tailandia.
Impresionado por su destreza, Pierce Brosnan le regaló a Jean Pierre el reloj oficial de James Bond.
Cuando no está grabando, el doble se dedica a atender su propia escuela de pilotos en Francia. Pero sueña con algún día, ser un actor “completo”, como aquellos a los que reemplaza en pantalla.
La próxima vez que veas una secuencia de acción que te quita el aliento en una película, no olvides buscar el nombre del francés entre los créditos.
Con información de France- Amerique
