En general, cuando se habla de Carlos de Inglaterra, aparece ligado a su tormentosa historia de amor con la Princesa Diana o se menciona su eterna espera en el trono. Pero ahora, el príncipe ha revelado un dato escalofriante y extraño sobre su pasado: tiene una lejana relación con Drácula.
No temas, en realidad, el heredero al trono británico no es ningún vampiro chupasangre. Lo que sucede es que su linaje está conectado con Vlad III, el Emparador, un noble del siglo XV que inspiró a Bram Stoker a crear al legendario personaje de ficción en su novela Drácula.
Así lucía Carlos de Inglaterra en 1981, cuando aún vivía su historia de amor con Lady Di. (Foto: AP)
De acuerdo con algunas versiones Vlad III asesinó a más de 100 mil guerreros en sus días en el campo de batalla. Pero lo que generó el mito de los vampiros, fue su costumbre de comer pan remojado en la sangre de sus víctimas.
5 razones para ver la nueva miniserie de “Drácula” en Netflix
Aunque nunca se ha confirmado al 100% que Bram Stoker haya usado a este noble como inspiración, sabemos que en cierto punto, el protagonista de su novela se llamaba Conde Wampyr. El escritor cambió el nombre a Drácula luego de leer un libro histórico sobre Transilvania y descubrir que en romano Drácula significa “hijo del Diablo”.
Así posaba Carlos de Inglaterra con su esposa Camila en 2005. (Foto: AP Photo / Toby Melville)
Este extraño vínculo del "vampiro" con la corona británica está siendo explotado por la Oficina Nacional de Turismo Romana para atraer el turismo a su país. De hecho, el dato curioso está incluido en folletos y videos promocionando esta nación como destino.
“Transilvania está en mi sangre”, dijo Carlos de Gales en una entrevista. “La geneología muestra que soy descendiente de Vlad, el Empalador, así que tengo un poco de interés en este país”, comentó.
Carlos de Gales, el eslabón más débil de la corona británica
El vínculo entre el príncipe Carlos de Gales y Vlad III se remonta a 16 generaciones atrás. El linaje de Carlos se une al de Vlad a través de su bisabuela, la Reina María, la consorte de George V. Siguiendo esta línea, el príncipe estaría conectado a Vlad IV, el medio hermano de Vlad III.
Carlos de Gales durante un discurso de la reina Isabel II. (Foto:AP Photo/Suzanne Plunkett)
Aunque es cierto que los vampiros pertenecen al mundo de la ficción, se sabe que la familia real británica tiene una tendencia a padecer porfiria, una deficiencia de hierro que podría haber inspirado el mito de los vampiros.
En 2006, Carlos de Inglaterra también compró una granja en en Viscri, una zona rural de Transilvania. Además, es miembro del Fideicomiso Mihai Eminescu, que trabaja para restaurar y preservar el legado cultural y natural de Transilvania.
El día de hoy el príncipe Carlos cumple 71 años pero si lleva en su sangre la maldición de los vampiros, podría vivir muchos, pero muchos años más.
Con información de Telegraph y Mental Floss