Hasta ahora nadie sabe en donde se encuentran los restos de la histórica pareja conformada por Cleopatra VII y Marco Antonio. Su tumba permanece extraviada, convirtiéndolos en uno de los enigmas más grandes que guardan las tierras y aguas de Egipto.
El arqueólogo Zahi Hawass, ex Ministro de Antigüedades del país árabe, hasta hace dos años codirigía la excavación de Taposiris Magna, un complejo monumental ubicado a unos 45 kilómetros al oeste de la ciudad de Alejandría. Ahí, una de sus compañeras, Kathleen Martínez, estaba convencida de que hallarían el lugar donde descansa la última reina del antiguo Egipto y el general romano.
Hasta ahora, esta búsqueda ha resultado infructuosa, pues las excavaciones llevan ya ocho años, y Hawass confirma que han aparecido monedas y estatuas con la imagen de Cleopatra, además de que se encontró un enorme cementerio en el exterior del templo, pero no hay rastro de la pareja.
El especialista puntualizó que aunque los trabajos de búsqueda continúan en Taposiris Magna, no hay ninguna prueba de la existencia de la famosa tumba. Es por ello que Zahi Hawass abandonó el proyecto y se embarcó en una nueva aventura: la búsqueda del enterramiento de Anjesenamón, la esposa de Tutankamón y Nefertiti.
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Las teorías sobre el lugar en el que descansan Cleopatra y Marco Antonio son variadas. Mientras Hawass cree que se encuentran en una tumba al interior del palacio de Alejandría, otros como la egiptóloga Joyce Tyldesley, del Museo de Mánchester, cree que la reina egipcia fue incinerada.
El misterio continúa rodeando el destino final de la mujer que se suicidó con la mordedura de una cobra egipcia. De encontrar el lugar donde reposan los restos de esta famosa pareja, sería uno de los grandes hallazgos de la egiptología, pero de momento, todo sigue en penumbras.
Con información de El Mundo y ABC
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