Christoph Waltz es el villano perfecto. Este actor austriaco se ha ganado el amor del público interpretando papeles que nos hacen odiarlo. Pero su capacidad no está limitada por estos roles y a menudo sorprende por salirse del molde.
Aunque ya tenía una carrera en Europa, no fue hasta trabajar con Quentin Tarantino en Inglorious Basterds y Django Unchained que alcanzó la fama mundial.
Comenzó su carrera cuando era adolescente y después saltó a la televisión. Waltz era conocido por dar vida a los villanos en los dramas policíacos de la pantalla chica en Alemania. Sin embargo, estos papeles no lo llenaban y sabía que debía encontrar nuevos desafíos para su talento.
Christoph Waltz ganó el Oscar a Mejor Actor de Reparto por su inolvidable personaje en Inglourious Basterds en 2010. (Foto: AP Photo/Mark J. Terrill)
Christoph Waltz nació el 4 de octubre de 1956 y siguehasta la fecha sigue sorprendiéndonos con su versatilidad. Para festejar a esta gran estrella, en De10.mx enlistamos sus mejores personajes:
El coronel Hans Landa nos puso la piel de gallina desde los primeros minutos de la historia situada en la Segunda Guerra Mundial. El contraste entre su naturaleza violenta y sus elegantes modales fueron la fórmula para crear al villano perfecto de Tarantino.
Waltz por momentos incluso logró opacar la actuación de Leonardo DiCaprio, un reto imposible para cualquier otro intérprete. El rol de el caza recompensas King Schultz le valió a Christoph el Oscar como Mejor Actor de Reparto, pese a las críticas que enfrentó la cinta por su distorsionada visión de la esclavitud.
Foto: AP Photo/The Weinstein Company, Andrew Cooper, SMPSP
Interpretando a Walter Keane, un personaje sacado de la vida real, Waltz demostró todo su arsenal interpretativo. Walter se robó el crédito por la obra artística de su mujer, Margaret, y por años se enriqueció con su talento. Exhibiendo la mejor parte de su personalidad carismática, no podemos imaginar a alguien mejor para el manipulador y cruel esposo que hizo a Amy Adams ver su suerte.
A pesar de su limitado tiempo en pantalla, Christoph logró destacar como Ernst Stavro Blofeld, líder de una siniestra organización criminal. Ya que Blofeld es uno de los villanos más icónicos del universo Bond, había grandes expectativas por su aparición en pantalla y podemos decir que Waltz cumplió con éxito el reto.
En la adaptación fílmica de la novela de Sara Gruen, Waltz volvió a ponerse en los zapatos de un personaje cruel y despiadado. August Rosenbluth, el líder de un circo itinerante demuestra su mal carácter tanto con los animales como la gente, haciendo que el público lo odie a muerte.
En esta cinta vemos a dos parejas que se reúnen para discutir la rivalidad entre sus hijos… sólo para terminar peleando entre ellos. Waltz interpretó a Alan Cowan y nos mostró que puede despegarse de su tono dramático para coquetear con la comedia.
En esta película austriaca, Christoph cambia su rol usual de villano a héroe, al interpretar a un investigador en busca de un asesino serial. Con una trama oscura y violenta, esta película cuenta una serie de homicidos que se relacionan a los 10 mandamientos bíblicos.
Lejos de los dramas históricos y los thrillers policiacos, Waltz se metió de lleno en esta comedia como el empresario doble cara, Bert Hanson. El actor interpretó al padre del personaje de Chris Pine, otro de los antagonistas de la historia.
Waltz dio vida a Léon Rom, un personaje tomado directamente de la realidad y a quien se le considera autor de terribles matanzas en el Congo. Christoph interpretó a un personaje con profundos conflictos emocionales que están marcados por un carácter violento y explosivo.
En un giro en su carrera, Waltz interpreta a Qohen Leth, un programador solitario que pierde sus ganas de vivir. En la historia, Qohen debe descubrir un extraño teorema y en el camino, se cuestiona el sentido de la humanidad.
Con información de Cinemaholic, The Celebrity Cafe, Biography y Cinemanet