¿Alguna vez has entrado a un restaurante y los precios exceden tu billetera? Seguro recuerdas el platillo más caro que has comido, pues algo así no se olvida. Así como con todo, existen creaciones gastronómicas que son carísimas para los simples mortales.
Como las delicias de Serendipity 3, un restaurante de Manhattan, Nueva York, famoso por sus comidas y bebidas bañadas en oro comestible o acompañadas de diamantes. Lo mejor de todo es que en el lugar, que ha roto récords Guinness con estos alimentos, también puedes disfrutar de cosas económicas… aunque claro sin probar el oro.
Su creación más reciente de Serendipity 3 son las papas a la francesa llamadas "Crème de la Crème Pomme Frites". Actualmente tienen el récord Guinness de las más caras del mundo.
Fueron hechas por el chef creativo, Joe Calderone, y el chef ejecutivo de la empresa, Fredrick Schoen-Kiewert. Cuestan 200 dólares y según la página tienen los siguientes ingredientes.
“Papas chipperbeck de upstate; champagne Dom Perignon; Vinagre de Ardenas de Champagne francés J. LeBlanc; lotes de grasa de oca pura sin jaula procedente de Francia; sal de trufa Guerande; aceite de trufa; queso Tartufello Pecorino de Creta Senesi; trufas negras de verano raspadas procedentes de Italia; mantequilla de trufa; nata orgánica 100% alimentada con hierba de vacas de Jersey; Raclette suiza trufada de Gruyere que ha sido envejecida durante 3 meses, y polvo de oro comestible de 23 quilates”.
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En 2012, el restaurante tuvo el récord a la hamburguesa más cara del mundo, que fue nombrada: Le Burger Extravagant. Salió al mercado con un costo de 295 dólares y tenía “carne de res Wagyu japonesa con infusión de mantequilla de trufa blanca”. Además iba acompañada de “queso cheddar James Montgomery, trufas negras, un huevo de codorniz frito, caviar, crema fresca”, y para finalizar el toque especial de “oro untado con mantequilla de trufa blanca”.
“The Frrrozen Haute Chocolate” es un helado que en 2007 se estrenó como el más caro del mundo. Tuvo un sorprendente precio de 25 mil dólares, pues se hizo en equipo con la joyería de lujo Euphoria New York.
Para su creación se mezclan 28 cacaos de la mejor calidad y lo decoran con 5 gramos de oro comestible de 23 quilates. La extravagancia se extiende hasta la copa, que es forrada con el mismo oro. Además en la base de la copa está una pulsera de oro de 18 quilates y la cuchara también es del mismo metal precioso, con diamantes incrustados… ¡Todo esto se lo lleva el cliente a casa!
La malteada no podía faltar para hacer equipo con la hamburguesa y las papas. Por eso crearon “LUXE Milkshake”, con un precio de 100 dólares. La bebida es servida en un vaso adornado con más de 3 mil cristales Swarovski y tiene ingredientes muy selectos como la leche de Jersey, salsa de caramelo de burra, granos de vainilla de Madagascar, vanilla Planifolia, y el elemento destacado, oro comestible de 23 quilates.
El “queso a la parrilla por excelencia" se coronó en 2014 como el sándwich más caro del mundo. Salió a la venta con un costo de 214 dólares. De acuerdo a la página de los Guinness son dos piezas de pan francés creado con “champán Dom Perignon y copos de oro comestibles, con mantequilla de trufa blanca y el muy raro queso Caciocavallo Podolico”. Este delicado platillo se acompaña con sopa de tomate de langosta sudafricana.
¿Se te antoja alguno?
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