El talento e innegable carisma que posee Javier Fernando de la Cueva Rosales, mejor conocido en el mundo de la música como Jay de la Cueva, lo han convertido en una de las figuras más importantes de la industria, pues sus más de 30 años de carrera artística hablan por él.
Hijo de Javier de la Cueva, uno de los pioneros del rock & roll en México, muchos creen que Jay inició su carrera musical con Micro Chips, pero antes de formar parte de ducho grupo, se dio a conocer como “Baby Rock”. Apenas tenía seis años, pero ya tocaba la batería. De hecho, realizaba algunas presentaciones al lado de su padre y otros veteranos del género.
Cuando Jay cumplió nueve años, fue invitado por Luis de Llano a formar parte de una banda coreográfica, donde los integrantes eran niños que tocaban sus propios instrumentos. Fue justo en ese momento cuando pudo dar muestras de su talento musical y experimentó el éxito ante el público.
Pero, honestamente, Micro Chips no tenía un gran futuro y la banda terminó por desintegrarse. A los 14 años le llegó una de las oportunidades más grandes de su carrera, pues se integró a Las Víctimas del Doctor Cerebro como músico invitado en la batería. Él mismo decía que junto al “Chipotle” y “El Abulón”, se sentía como en familia.
El gran salto de Jay de la Cueva en la música vino de la mano de Molotov. En 1995, junto a Tito Fuentes y Micky Huidobro, sentó las bases de una de las bandas más emblemáticas de México, la cual llegó a romper paradigmas tocando temas que muy pocos se atrevían, razón por las que fueron censurados en más de una ocasión.
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En Molotov, Jay tocaba el bajo, pero un año después el músico dejó a la banda para unirse a Fobia, y los “molochos” lo sustituyeron con Paco Ayala. Sin embargo, Jay sólo fue el baterista en el disco Fobia On Ice, pues la banda se separó en 1997. En el año 2003 Fobia regresó con su disco Rosa Venus, el cual fue producido por Jay, quien regresó a la banda por cuatro años más.
En ese ir y venir, Jay de la Cueva generó dos proyectos musicales vigentes en la actualidad: Titán y Moderatto. La primera es una banda con influencias electrónicas, con la que ha realizado giras en América y Europa, además de que es una de sus creaciones más exitosas en México.
Con Moderatto la historia fue distinta, pues lo que hizo fue una parodia al glam rock de los 70, que se caracterizaba por sus covers a canciones pop en español, pero esta “broma” se salió de control y se convirtió en una de las agrupaciones pop más queridas del país. Bajo su alter-ego de Bryan Amadeus, Jay es el vocalista y guitarrista de la banda.
Uno de sus últimos proyectos como músico fue Mexrrissey. Era conformado por Jay, Ceci Bastida, Chetes, Adán Jodorowsky, Sergio Mendoza, Alejandro Flores, Camilo Lara y Ricardo Nájera. Básicamente “latinizaban” las canciones icónicas del británico Morrisey (una etapa penosa de su carrera que todos queremos olvidar).
Este ha sido el camino de Jay en la música, el cual también ha estado marcado por su evolución física; hoy es prácticamente todo un ícono del estilo que sabe sacar partido de sus atributos. ¡Mira nuestra galería en la parte de arriba!
Con información de Telehit, Rock 111 y Taringa
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