Hay personas que aman la adrenalina, que son adictas a ella. Esa constante sensación de emoción que invade su cuerpo es insustituible. El hecho de saber que pueden hacer algo que no cualquier persona se atrevería a hacer, los impulsa a buscar nuevos retos para sobresalir.
El libro de los Récords Guinness es el mejor ejemplo de ésto, pues se publica cada año y contiene una colección de las metas cumplidas, tanto humanas como del mundo natural. El propio libro tiene su récord al ser la serie de libros más vendida con derechos de autor de todos los tiempos. Sí, también es uno de los ejemplares más robados en las bibliotecas públicas de Estados Unidos.
Es tal la fama que tiene, que ha “inspirado” a varias personas a romper las marcas que están registradas en él. Podemos hallar metas curiosas y extrañas, pero también hay otras en las que se pone en riesgo la vida.
En De10.mx, para conmemorar la primera publicación del Libro de los Récords Guinness, recopilamos 10 de los retos más peligrosos que existen, y de los que algunos no han salido bien librados…
Un acróbata norcoreano terminó su actuación en el gran circo de Moscú con una grave lesión, al tratar de marcar un nuevo récord Guinness haciendo seis saltos en el aire. En el primer intento falló, y en el segundo, a la hora de caer en el colchón, se lastimó severamente el cuello.
El británico Andrew Cotton tiene el Récord Guinness por surfear una gigantesca ola de 24 metros, la cual se originó por la marea que generó la tormenta invernat Brigid, en Playa del Norte Nazaré. El peligro radica en que las enormes olas podrían hacerlo desaparecer en cuestión de segundos.
El 8 de octubre de 1978, el australiano Ken Warby logró este récord cuando su lancha Spirit of Australia alcanzó los 511.1 kilómetros por hora. La motonáutica no es un deporte muy extendido, ni barato, pero despierta una gran pasión entre los fanáticos, es por ello que desde 1919, cuando se impuso el primer récord en esta competencia, de 114 kilómetros por hora, el 85% de las personas que intentaron batirlo acabaron muertas. Warby sigue invicto.
4. Salto del edificio más alto
Fred Fugen y Vince Reffet, son dos Skydivers que se quedaron con el récord Guinness al realizar un impresionante salto desde la famosa torre Burj Khalifa en la ciudad de Dubai. Este rascacielos mide unos 827 metros de altura.
Lázaro Schaller, un suizo de 27 años de edad, batió el récord mundial de salto de acantilado al lanzarse desde un precipicio de 58.8 metros, alcanzando una velocidad de más de 120 km/h. Schaller superó el récord de su compatriota Olivier Favre, que en 2009 saltó desde una altura de 54 metros. Al salir del agua señaló que casi se disloca la cadera al tocar el agua, la cual fue carbonatada para “suavizar” la inmersión.
El piloto francés Guerlain Chicherit intentaba batir la marca del salto de longitud en coche más largo del mundo, al volar 110 metros con un Mini de mil caballos de fuerza, ayudado por una rampa de despegue. El salto fue bueno, pero el aterrizaje se complicó.
7. Cruzar un río, sujetado del cabello
En 2011, el indio Sailendra Nath Roy se adjudicó el Récord Guiness al recorrer 82.5 metros en un cable, del que solo se sujetaba con su cabello. Ese mismo año, quiso batir su propio récord, pero murió en el intento. Había avanzado casi la mitad de los 183 metros que pretendía recorrer sobre un cable a 20 metros sobre el río Teesta, cuando su cabello se atasco. Estuvo más e 20 minutos intentando liberarse. Los aplausos se convirtieron en gritos de terror cuando Roy comenzó a sufrir un infarto. El hombre murió ante la mirada atónita de sus espectadores, entre los que se encontraba su familia.
Josef Toedtling, un doble de acción austriaco del cine que cuenta en su filmografía con 49 películas ostenta este récord. Es la persona que ha estado el mayor tiempo con el cuerpo cubierto en llamas, con un tiempo de 5 minutos y 41 segundos, superando la marca anterior por 16 segundos.
9. Romper la barrera del sonido
En el 2012, este austríaco se tiró desde más de 39 mil metros de altura, con lo que se convirtió en el primer ser humano en romper la barrera del sonido. Alcanzó una velocidad de caída de 1,342.8 kilómetros por segundo. Sin duda, un récord que no cualquiera podría conseguir, pues un solo descuido, por mínimo que sea, podría significar la muerte.
10. Caminata en las alturas
Un hombre de Reino Unido, llamado Mike Howard, alcanzó el Récord Guinness al caminar entre dos globos aerostáticos a una altura de 6,522 metros de altura, sobre Albuquerque, Nuevo México. Tiempo después repitió su hazaña, pero con los ojos ¡cerrados!
¿Qué te parecen?