En febrero de 2014 se puso punto final a la historia de adicciones de Philip Seymour Hoffman, un talentoso actor que dejó en su trayectoria numerosos éxitos aclamados por la crítica y amados por el público. A pesar de haber estado sobrio dos décadas, bastó un desliz para que Hoffman recayera y comenzara un ciclo destructivo que terminó con una sobredosis en su departamento de Nueva York.

Mimi O’Donnell pareja del actor y madre de sus tres hijos, contó que Hoffman siempre había sido sincero con sus adicciones, que comenzaron a los veinte años cuando experimentó con la heroína. Miembro de Alcohólicos Anónimos, Hoffman parecía haber superado su turbulento pasado.

Philip Seymour Hoffman se sintió tentado y volvió a beber, de manera moderada. La situación se le fue de las manos y tras acabar la obra en Broadway Death of a Salesman, en 2012, recayó en el uso de medicamentos y heroína.

Toda su frustración relacionada con la batalla por mantenerse a flote, se veía reflejada en el trabajo de Hoffman, quien vertía su pasión en cada proyecto que se involucraba. Quizá fue esta obsesión lo que llevó a que Philip tocara fondo al rodar la tercera película de Hunger Games (Los Juegos del Hambre) en Atlanta. Tres días después de regresar a Nueva York, el actor murió.

Sin duda recordaremos a Hoffman por sus personajes y películas, y en el aniversario de su nacimiento, un día como hoy en 1967, te presentamos sus mejores trabajos:

1.

En la actuación con la que ganó el Oscar en 2006, Hoffman se metió en la piel del escritor Truman Capote, justo cuando decide escribir In cold blood (A sangre fría), una de sus novelas más conocidas. Philip se esforzó por capturar lo mejor posible al polémico Capote y su relación con el asesino Perry Smith.

En esta adaptación de la novela de John Le Carré, Hoffman interpreta a Günther Bachmann, un espía alemán encargado de apresar al refugiado checheno Issa Karpov, acusado de terrorismo. Mientras el reloj avanza nos damos cuenta que detrás de esta operación hay otros intereses y más de lo que pensábamos en juego.

Cuando Hoffman falleció, estaba a la mitad del rodaje de Sinsajo, segunda parte. Aunque se especuló que las escenas de su personaje serían completadas con tecnología CGI, al final se hizo una modificación en el guión para darle a Plutarch Heavensbee, interpretado por Philip, una digna despedida.

 

4.

En una de sus últimas películas, Hoffman hizo mancuerna con el director Paul Thomas Anderson y el gran actor Joaquin Phoenix para contar la vida al interior de un perturbador culto religioso. Aunque el personaje de Hoffman está basado en el fundador de la Cienciología, L. Ron Hubbard, la trama tiene un camino distinto al de esta religión.

Sin duda el papel más memorable en este elenco se lo lleva Al Pacino como el ex militar Frank Slade, trabajo por el que se le dio un Oscar. Pero no podemos dejar atrás al engreído George Willis Jr., interpretado por Philip, quien nos sacó canas verdes con su prepotencia.

Si hay una actriz a la que sea difícil opacar es Meryl Streep, pero Hoffman estuvo cerca con su interpretación del padre Brendan Flynn. En esta cinta, donde la mayoría del elenco principal estuvo nominado al Oscar, debemos intentar adivinar cuál es la relación de Flynn con uno de sus pupilos.

7. (Mary y Max)

Es increíble como Hoffman logra remover nuestras emociones aún sin aparecer en pantalla. Este es el caso del relato animado donde se desarrolla la tierna amistad por correspondencia entre Max (Philip Seymour Hoffman), un adulto con Asperger, y Mary (Toni Collette), una niña de ocho años.

En 2011, Brad Pitt protagonizó esta cinta como el director del equipo de béisbol Oakland A's, Billy Beane, quien introduce un modelo de computadora para adquirir nuevos jugadores. En la esquina contraria esta Philip Seymour Hoffman, como otro mánager deportivo que se opone a la revolución tecnológica de Beane.

Hay pocas cintas que logran hacerte creer que todo el elenco tiene verdadera química. Este es el caso de la cinta en la que Phillip hace el papel de un divertido DJ a bordo de un barco fiestero que se lanza en una cruzada por librar las leyes contra el rock impuestas en Inglaterra.

10. Patch Adams

Aunque la historia del extravagante doctor Patch Adams y sus métodos poco ortodoxos para tratar a sus pacientes ya nos había robado el corazón, tras la muerte de sus protagonistas se ve bajo una luz distinta. Esta cinta se convirtió en una oportunidad única para ver juntos a Robin Williams y Philip Seymour Hoffman en un duelo de talento increíble.

Ambos actores, quienes representan ideales extremos en la trama de la pantalla, en la vida real tuvieron historias similares, ya que Williams se suicidó también en 2014. Desgraciadamente, Hoffman y Williams se vieron obligados a combatir en secreto sus demonios mientras daban lo mejor de ellos ante la cámara.

Con información de

Google News

TEMAS RELACIONADOS