Sin duda un buen festival de música es una experiencia incomparable. El ver a varias de las bandas más emocionantes del mundo en un mismo día, la reunión de tantos amantes de la música y otras amenidades que ponga el festival crean días de ensueño. Sin embargo, como todo en la vida, nada es perfecto y hay algunas cosas que nos encantaría evitarnos de los festivales. ¿Cuáles son las suyas?
1. Los baños
Son muy pocos los festivales con un escuadrón de limpieza lo suficientemente veloz (y tal vez un público respetuoso) para tener sus baños siempre impecables. Todos los que no son así, son un opuesto bastante desagradable… Tiene que existir una forma mejor de hacerlo.
2. Los que empujan
Todos queremos ver a la banda, todos queremos un buen lugar, todos somos fans, todos tenemos que encontrar amigos, ir por comida… lo que sea. No hay pretexto para empujar. Si no puedes pasar, no pases y ya, no te vas a morir por no estar 5 centímetros más adelante en el concierto. Respeta a los demás.
3. La comida
Hay de dos… o no es muy buena o tienes que perderte a dos grupos para comprar un poco. Claro, hay horas pico en las que todos quieren comer y ni modo, te tocará más fila, pero si los organizadores pensarán más en una ecuación que incluya velocidad y calidad, seguro sería hasta mejor negocio.
4. Los precios
Todo es carísimo y por más que lo sepas, ahorres y te hagas a la idea de que así son las cosas, a veces gastas demasiado dinero en simplemente sobrevivir a los días del festival. Tal vez con precios un poco más bajos hasta te animarías a gastar más.
5. Las bandas de relleno
No a todos nos gusta lo mismo, pero de pronto sí hay unos grupos que solamente están ahí para llenar un horario que pudo haber ocupado cualquier otra propuesta más interesante o de plano nadie, pero los terminas viendo porque están antes que tu banda favorita, aunque nadie los esté pelando.
6. Los horarios
Dos de las bandas que más quieres ver siempre estarán al mismo tiempo, aún cuando no quieras ver a tantas bandas del festival. Es una ley que siempre aplica y de la que al parecer nunca nos podremos librar.
7. El polvo, lodo y derivados
Casi todos los terrenos de festivales son garantía de que regresarás a tu casa como si hubieras ido de campamento. Tierra en la nariz, en las uñas, en los zapatos y quién sabe dónde más.
8. Los que están demasiado borrachos
Si quieres platicar, simplemente no te interesa lo que tienes de frente y quieres seguir pasándola bien con tus amigos pásate para atrás. No hay ningún problema, nadie te va a correr por poser, solo deja escuchar a los que sí tienen ganas de hacerlo.
9. Los que no dejan escuchar
10. La ida y la llegada
No importa si vas en transporte público o en coche, llegar y salir siempre será una odisea. Encontrarás tráfico, tratarás de entrar por la puerta equivocada, darás vueltas o caminarás kilómetros y kilómetros para llegar a la puerta, de esa no te salvas.
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