Los años van pasando y las cosas van cambiando. Sin embargo hay ocasiones en donde nos negamos a dejar la juventud, y pensamos que es eterna, pero desgraciadamente no es así.
Por más que nos aferremos a no dejar las fiestas, las desveladas y otros hábitos que hacíamos cuando éramos jóvenes, hay alertas que nos indican que nuestro tiempo ya pasó.
Por más que nos neguemos a aceptarlo los años dice lo contrario, si antes quedarnos despiertos hasta la madrugada no nos hacía ni cosquillas, hoy una desvelada se siente peor que la cruda de una memorable borrachera...
Esto es peor si al otro día hay que madrugar para irse a trabajar, ahí las cosas se ponen "color de hormiga": dolor de cabeza, sueño y una pesadez te invaden para hacer las cosas.
Antes con estirar la mano nuestros padres nos daban dinero y sólo nos teníamos que preocupar por ir a la escuela; ahora, si ya estamos casados, hay que pensar en que hay otros gastos, y si vivimos solos hay que pensar en la renta y demás compromisos, simplemente un exceso puede hacer que nuestra quincena se vea disminuida.
En este sentido los sitios openrevista.com y Recreo Viral te dicen cuáles son algunas de las señales de que indican que ya no eres un "chavo".