En el transcurso de nuestra vida pasamos por momentos difíciles, a veces momentos de tristeza y pérdidas. Estos momentos, a lo largo del tiempo, nos van dejando ciertos aprendizajes, nos van haciendo más fuertes y, en general, nos ayudan a conocernos mejor, a crecer y mejorar como seres humanos.
Algunos de esos baches en el camino de la vida suelen estar relacionados con las rupturas amorosas. Todos hemos pasado por relaciones que, en un momento dado, terminan; relaciones que, por diversos motivos, llevan a los antes integrantes de la pareja a tomar caminos diferentes. Estas rupturas se viven, en general, como una pérdida y, ante dicha pérdida, la persona pasa por un proceso de duelo (negación y aislamiento, enojo, negociación, depresión y aceptación).
Es normal que al terminar una relación (por los motivos que sean) se experimenten las etapas del proceso del duelo; es normal que en un principio extrañes mucho a tu ex y te sientas enojado, que quieras que todo fuera como antes, que creas que no es posible que ambos ya no compartan lo que antes compartían, que estés triste y que, en ocasiones, quieras regresar, pero es importante pasar por cada una de las etapas del duelo antes de tomar cualquier decisión, para estar seguro de lo que sientes y quieres.
Finalmente no se trata de buscar regresar simplemente para no seguir sintiéndote triste o porque te sientes solo. Es importante revalorar la situación y, para ello, dejar que pase un tiempo resulta siempre efectivo, ya que, a la distancia, las cosas se ven diferentes y desde otra perspectiva.
Ahora bien, si incluso a la distancia estás seguro de que quisieras reiniciar una relación con la pareja que terminaste, es importante tener en cuenta los siguientes puntos:
Motivo por el cual terminaron.
Hay que tener muy claros los motivos de la ruptura; en ocasiones cuando se trata de malos entendidos o falta de comunicación, la reconciliación es mucho más fácil, ya que la confianza y el cariño de la relación de pareja no se ha visto afectada.
Sin embargo, cuando los motivos de la ruptura tienen que ver con infidelidades, mentiras o falta de amor, habrá que evaluar la razón por la cual buscas reanudar una relación en la cual sufres de desconfianza o desamor.
Es importante tener en cuenta cuáles son los motivos que llevaron al rompimiento para no repetirlos si es que regresas con tu ex y si no es así, también te puede servir para reflexionar respecto a futuras parejas.
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Quién terminó la relación.
Quizá sea más fácil reanudar una relación cuando eres tú quien andaba indeciso y, finalmente, te has decidido, porque cuando es el otro quien ya no quiere, te estás poniendo en una situación muy difícil.
En este sentido, es importante tener una adecuada autoestima, ya que querer estar con alguien que ya no quiere estar contigo, puede hacer sentirte un poco devaluado e impedir que encuentres a alguien que, verdaderamente, aprecie tu compañía.
Motivos reales por los que quieres regresar.
Ante un cambio o pérdida siempre viene una oportunidad de crecimiento. Es importante tener claro que toda ruptura es dolorosa por más justa o necesaria que haya sido. Sin embargo, hay que revalorar si realmente necesitas regresar a la relación que ya se fracturó. Si es así, tendrán que trabajar juntos para sanarla y evitar que se rompa de nuevo. De lo contrario, es importante evaluar si el regresar a algo que ya terminó no sea por miedo a la soledad o al cambio.
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Qué te impide buscar otra pareja.
Es importante aprovechar el momento de la ruptura por doloroso que sea para revalorar y reevaluar hacia dónde quieres ir y cómo lo quieres hacer. Resulta vital aprender de los errores y, sobre todo, de la experiencia y saber que no estás solo y que si requieres apoyo, siempre hay profesionales que te ayudan en aquellos procesos difíciles de la vida.
