El campo de la sexualidad es uno de los temas más complejos de la humanidad. A ciencia cierta no se sabe por qué una persona disfruta más que otra con una posición sexual o qué hace que la química sea mayor entre una pareja que en otra. Por ejemplo, los fetiches, hay quien logra la excitación con la lencería sexy o el olor de su pareja, ¿por qué no? los zapatos; hay mucha tela de donde cortar, por ello es que no debemos sorprendernos de lo que les llama la atención a otros, claro, mientras todo esté en el límite legal y consensual.
Sabemos que hay hombres y mujeres que no disfrutan de las relacione sexuales cuando ella está en su período y es que para muchas chicas es un momento incómodo debido al dolor que sienten o simplemente a que regla les parece muy abundante, sin embargo hay beneficios en tener sexo de esta manera.
Apartando los beneficios del sexo, también se conoce una manifestación del fetichismo que tiene como su principal objeto, justo eso, la sangre menstrual. Hay foros en Internet en los cuales se puede conocer de hombres y mujeres que son “adictos” a la regla, les gusta el olor, el sabor y la consistencia, de hecho, son afectos a usar durante el coito, las toallas o tampones usados de sus parejas, y en casos más extremos, compran en la web, estos mismos artículos de higiene, pero por supuesto, ya utilizados, así lo publica Mélanie Mendelewitsch para el sitio Vice.com, que cita a la entrevista con un hombre que se declara fetichista con la sangre de la menstruación.
Así describe el sexo con su pareja:
“Cubrimos la cama con toallas. A veces la sangre se pasa hasta las sábanas pero no me molesta porque la limpieza también es parte del ritual. Me encanta hacerle sexo oral en esos días del mes. Todavía le incomoda un poco esa parte pero para mí es como estar en el cielo. Cuando está en su periodo, se excita mucho más y es más desinhibida.”
Si bien hay un tabú para hablar del tema debido a la concepción natural de la menstruación, también es cierto que en gustos se rompen géneros y en este caso la regla es la excepción.
El hombre científico para definir al término es Menstruofilia o Menofilia, explicando que es una parafilia sexual en la que la persona se siente atraída sexualmente sólo por mujeres que se encuentran menstruando. Esta inclinación es hacia toda fémina en este período, así como todos los objetos que puedan estar relacionados con el mismo como las toallas sanitarias, la sangre menstrual, los tampones, por supuesto usados.
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El concepto es mejor conocido como Red Wings y es sin duda un tema controversial, pues nos refiere además de a un fetiche, lo hace con la que es considerado como uno de los temas “sagrados” de la salud femenina, la menstruación, así lo señala el portal mazmorra.net
“El olor de su sexo me embriaga, igual que el de las toallas usadas. A mi esposa le gusta terminar nuestros encuentros sexuales masturbándome con la toalla que acaba de usar, sola o con su ropa interior. Yo también tengo mis gustos en ese ámbito. Hay toallas que son mucho mejores que otras.” Finaliza la entrevista en Vice.
