Una chica de 20 años se enteró que su padre, un hombre que la abandonó de bebé y de quien no sabía nada, tuvo otro hijo. Gracias a las redes sociales, la joven busca y encuentra a su hermano en Facebook, así que deciden entablar una relación, se hacen amigos, pero unos meses después, la vida les tiene deparada una sorpresa. Están enamorados.
Son Ana y Daniel Parra y cansados de esconderse durante años, se presentaron en un show de televisión en España, ahí anunciaron que son pareja, no pudieron evitar enamorarse. Hace ya un año de esto, hoy, los hermanos-novios están rompiendo toda clase de reglas, pues están a la espera de su primer hijo.
No, no es parte de una telenovela, o de una serie de Mujer: casos de la vida real. Es una historia que está acaparando los diarios en España y, claro, está retando a la ciencia.
Ana tiene 28 años, trabaja en una tienda de decoración, él tiene 25, es encargado de un supermercado. Comparten apellido, perro y en unos meses se convertirán en padres, por sus venas corre la misma sangre y saben los riesgos que conlleva tener un hijo con la misma consanguinidad. Tienen mayor riesgo de enfermedades como la fibrosis quística.
Ana se mudó con Daniel cuando aún mantenían una relación de amistad, pero comenzaron a gustarse, una noche salieron de fiesta y se dieron el primer beso, ya no hubo camino de regreso.
A pesar de que durante años llevaron una relación de hermanos, luego se escondieron, ahora sus padres han tomado muy bien su noviazgo, más ante la llegada de su hijo.
La ley en España no permitirá que registren al niño como padres, solo a Ana, Daniel aparecerá legalmente como su tío.
El romance está en discusión en muchos lugares del mundo, pues el incesto aún es considerado como un delito en muchos países.
Ana, su papá y Daniel
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