Tal y como hemos realizado conteos para que la mujer disfrute más con las posturas sexuales, ahora le toca a los chicos.
Estas posiciones eróticas están diseñadas para que sea él quien disfrute un poco más, pero para ellas será también muy placentero. A tu chico le permitirá saber que tiene el control, lograr una penetración más profunda y también embestir a la mujer con mayor plenitud.
Checa los tips que te presentamos para aumentar la intensidad del orgasmo femenino, y por supuesto, el de él, gracias a un recuento de Men´s Health. ¡A poner en práctica!
1: El alcoholímetro
Ella deberá arrodillarse frente al chico y envolver el pene con la boca a fin de que roce sus labios en el glande. El movimiento continuo de la lengua sobre el cuerpo del pene lo excitará hasta el éxtasis. Un tip, si se colocan frente a un espejo, donde él pueda disfrutar de la vista trasera de su chica, la experiencia será aún más placentera.
2: La flexión o El escalador
Lo más importante aquí es el contacto visual. El hombre se coloca encima de ella como en "el misionero", pero el truco es que ella levante un poco más el coxis para que el peso de él no esté recargado en ella. Primero deberá comenzar una penetración suave, cuando pasen los minutos, la idea es que la embista lo más fuerte que pueda y con mucha velocidad.
3: La cuchara o La Llave para dormir
Esta posición permite gozar mucho porque las paredes de la vagina están muy cerradas y permiten la penetración más profunda. Si ella está embarazada es una opción perfecta. La idea es tirarse en la cama y él deberá ponerse detrás de su pareja. Un buen truco para sentir que el hombre lleva el control es tomar los hombros de su chica y pedirle que se incline, así ambos disfrutarán.
4: El desatascador
Es una postura perfecta para un mañanero en la ducha por ejemplo. Sólo debes recargarla de frente en el lavabo o una pared y penetrarla por detrás. Besa su cuello y penétrala como una bestia. Si están frente a un espejo ¡qué mejor!
5: El rompecojines
Esta postura permite que él domine la situación. Toma a tu chica y coloca su cuerpo como en "el perrito", pero sube sus piernas en, por ejemplo, el brazo del sillón o el potro del amor si estás en un hotel. Recuesta su pecho sobre un cojín y ahora si penétrala con fuerza, si ella cruza sus tobillos, el placer subirá para ambos.