Si existiera una fórmula matemática para conseguir la relación de pareja perfecta, nadie sufriría por amor. Tampoco existieran los tóxicos y tóxicas que llegan a dañar al otro tanto física, como mentalmente.
Las relaciones de pareja son complejas y no es fácil mantener una por tantos años, incluso en las parejas más antiguas hubo, más de una vez, desacuerdos y el deseo de “tirar la toalla”. No podemos asegurar un final feliz por siempre, pero sí podemos seguir ciertos hábitos diarios para cultivar un vínculo saludable y duradero.
¿A quién no le gusta escuchar lo bien que se ve? Los cumplidos sinceros levantan el buen ánimo de las personas y más si viene de un ser querido. Una simple frase puede obtener una gigante sonrisa. Si estás con esa persona seguro amas algo de él o ella, no dudes en hacérselo saber.
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Antonia Hall, psicóloga experta en relaciones y autora del libro The Ultimate Guide to a Multi-Orgasmic Life, menciona que nadie quiere sentirse dado por sentado, por eso siempre es bueno agradecer, incluso en las más pequeñas cosas. Dar las gracias provocará que tu pareja se sienta apreciado y querrá hacer más cosas por ti y su relación.
No hay nadie que no disfrute de una tarde en el sillón, solo viendo películas y comiendo palomitas. Este “no hacer nada” desarrollará aún más su compañerismo. Si no son fanáticos de las series, pueden leer juntos o acompañarse mientras bañan al perro. Los recuerdos no solo se crean en la fase del enamoramiento.
Nunca des por hecho que la otra persona sabe que lo amas. Sí, están juntos, pero de acuerdo a la experta en relaciones, Bonnie Winston, decir estas palabras durante el día es importante. Para darle variedad, también puedes usar “te quiero”, “te deseo”, “me enorgulleces” o “eres todo para mi”. Solo recuerda siempre decirlas con intención y no por costumbre u obligación.
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¿Recuerdas cuando comenzaban su relación y no podían quitarse las manos de encima? Las muestras de afecto no tienen que acabarse con el tiempo. Según Antonia Hall, “la intimidad y el tacto te mantienen conectado con tu pareja”. Y no, no tienes que comerle la cara en el parque, pero ir por la calle tomados de la mano o acurrucarse en una reunión es suficiente.
La vida nos lleva al tope, siempre corriendo y trabajando, pero es esencial no dejar de reír por las cosas que pasen. Pueden hacer bromas de complicidad o ver un programa divertido… ¡Qué no se amargue el espíritu!
Aunque se vean seguido, pueden compartir cosas graciosas que les pasen o el nuevo chisme de la oficina. No deben de desaparecer durante el día, por más ocupados que estén, incluso en la hora de la comida pueden preguntarle al otro cómo va el trabajo o si ya comió. Gilda Carle, autora de Ask for What You Want AND GET IT, menciona que "las personas que se comunican entre sí durante sus días ocupados le hacen saber a su pareja que están pensando en ellos, a pesar de todas las otras cosas que suceden".
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Tal vez algún deporte, un instrumento musical o cocinar. Tener un hobby juntos como pareja les da motivación para esperar el momento a realizarlo, al mismo tiempo que crean nuevos recuerdos. Si no tienen actividades en común, pueden encontrar una, empezar desde cero y aprender juntos.
Nadie lee mentes, si no se expresa lo que se quiere la otra persona jamás sabrá, sin importar cuánto se conozcan. Pedir ayuda no es malo, ni hace a alguien menos. Gilda Carle comenta que “las relaciones saludables alientan a las personas a ser auténticas en sus sentimientos para que puedan expresarse genuinamente”.
Cada uno tiene diferente personalidad y un pasado, pero ahora están juntos y son un equipo, por lo que deben trabajar como tal. Para la autora Antonia Hall, “con una mentalidad de equipo, las parejas se animan mutuamente y son más fuertes juntas". Recuerda que si quieres un futuro con tu pareja deberás comenzar a pensar en “nosotros”, en lugar de “yo”.
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Con información de: RD
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