En su juego número 79 con la novena de los Dodgers, Shohei Ohtani hizo historia una vez más, no solo por su desempeño en el diamante, sino también gracias a un momento curioso que pudo haber terminado en tragedia y que quedará grabado en la memoria de todos los aficionados de la novena de Los Ángeles.
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Ohtani brilló al conectar un jonrón en su primer turno al bate, contribuyendo así al triunfo de los Dodgers por 4-0 sobre los Medias Blancas de Chicago en el Guaranteed Rate Field. Consiguió su décimo juego consecutivo remolcando al menos una carrera, estableciendo una nueva marca para los Dodgers.
Sin embargo, el momento más memorable del juego no ocurrió dentro del terreno de juego, sino en el dougout del equipo de Los Ángeles, donde el 'bat boy', de nombre Javier Herrera, se convirtió en un héroe improvisado.
En medio del juego, cuando se disputaba la parte alta del tercer inning, una línea de foul viajó a toda velocidad directamente hacia la zona donde Ohtani se encontraba mirando el duelo.
Con reflejos rápidos y precisos, el 'bat boy' atrapó la pelota justo antes de que se impactara contra el rostro del jugador de los Dodgers.
Muchos aficionados, e incluso otros jugadores de los Dodgers, quedaron impactados por la gran atrapada del 'bat boy', quien sin sobarse las manos entregó la pelota como un auténtico héroe; ya que si la canica hubiera impactado al pelotero japonés, hubiera provocado una considerable lesión en la cara del jugador.