El mundo del beisbol ha sido sacudido por la trágica pérdida de Mike Brumley, exinfielder y reconocido coach de las Grandes Ligas.
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La carrera de Brumley en las Grandes Ligas se extendió desde 1987 hasta 1995, durante la cual jugó para seis equipos diferentes. Sus contribuciones más recientes se dieron como coach e instructor en Ligas Menores para los Atlanta Braves, desde 2018 hasta 2022, donde dejó una huella indeleble en la carrera de muchos jóvenes jugadores.
El exjugador e instructor de la MLB falleció en un accidente automovilístico a los 61 años de edad. El incidente ocurrió el sábado por la noche en Mississippi, dejando consternados a jugadores, colegas y aficionados por igual.
La tristeza se extendió entre las franquicias de la MLB. Los Seattle Mariners, equipo para el cual Brumley jugó en 1990 y más tarde fue coach durante cuatro temporadas, emitieron un sentido homenaje en redes sociales destacando su impacto duradero tanto dentro como fuera del terreno de juego.
Nacido como selección de segunda ronda por los Boston Red Sox en 1983, Brumley formó parte de un intercambio significativo antes de debutar en las mayores. Su carrera incluyó etapas con los Chicago Cubs, Detroit Tigers, Seattle Mariners, Red Sox, Houston Astros y Oakland Athletics. A lo largo de 295 juegos en las mayores, Brumley bateó .206 con tres cuadrangulares y 38 carreras impulsadas.
Además de su carrera como jugador, Brumley se destacó como coach, trabajando con equipos como los Cubs en 2014, y teniendo roles de instructor en Ligas Menores con los Texas Rangers y Los Angeles Dodgers en diferentes períodos.
Antes de ser seleccionado en el draft, Brumley fue el shortstop titular del equipo de Texas que ganó la Serie Mundial Universitaria en 1983, junto a futuros lanzadores estelares de las Grandes Ligas como Roger Clemens y Calvin Schiraldi.
El legado de Mike Brumley no solo se mide por sus estadísticas en el campo, sino por el impacto que tuvo como mentor y guía para generaciones de jugadores, dejando una marca imborrable en el beisbol.