El patinador estadounidense Jon Maravilla, de 20 años de edad, estuvo a punto de abordar el vuelo 5342 de American Airlines, un Bombardier CRJ700, que se estrelló trágicamente en el río Potomac, en Washington D.C.
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El joven patinador, junto con su equipo, había participado en un torneo de patinaje sobre hielo en Wichita, Kansas. La noche del accidente, Jon y su equipo se dirigían al aeropuerto para tomar un vuelo de regreso a Washington. Sin embargo, un incidente con su mascota cambió el curso de los acontecimientos.
¿Por qué motivo el patinador estadounidense no pudo abordar el vuelo con destino a Washington?
Cuando Jon llegó al aeropuerto para hacer el check-in, se enfrentó a un dilema: las autoridades de la aerolínea le negaron que su perro abordara el vuelo.
"Era nuestro vuelo de regreso, no entendía por qué de repente ya no era posible traer a mi perro", declaró Maravilla a la agencia de noticias rusa RIA Novosti.
Sin alternativa y sin querer dejar atrás a su fiel compañero, Jon decidió emprender el viaje de vuelta en auto, una decisión que, sin saberlo, le salvó la vida.
"No podía dejarlo atrás, así que decidimos conducir por carretera", comentó.
Horas después, la noticia del trágico accidente llenó los titulares: el vuelo 5342 de American Airlines, en el que iban 60 pasajeros y 4 tripulantes, colisionó con un helicóptero Sikorsky UH-60 Black Hawk de la armada estadounidense mientras se aproximaba al Aeropuerto Nacional Reagan.
El impacto llevó al avión a caer en las aguas del río Potomac, con un saldo devastador: no hubo sobrevivientes.
Entre los pasajeros del vuelo se encontraban 14 compañeros de equipo de Jon, así como destacados patinadores, incluyendo a la pareja rusa de patinaje artístico, Evgenia Shishkova y Vadim Naumov, campeones mundiales en 1994, junto a su hijo Maxim Naumov. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, lamentó la pérdida de sus conciudadanos en el accidente.
Las redes sociales se llenaron de historias y mensajes de Jon Maravilla documentando su viaje por carretera. "No permiten pasar la puerta para abordar el vuelo; ¡sácame de Kansas por favor! Arranca el viaje de 14 horas", fueron sus palabras mientras compartía su travesía, ajeno al destino que había esquivado.
Los esfuerzos de rescate han sido intensos, con los bomberos locales recuperando hasta el momento los restos de 27 pasajeros del avión y un miembro del equipo del helicóptero.
