Arrancó la Semana 1 de la NFL y uno de los encuentros más atractivos era el de Los Angeles Chargers y los Las Vegas Raiders.
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Sin embargo, el triunfo de los Chargers por 22-10 se vio algo empañado por una pelea en la recta final del encuentro, la cual terminó con dos jugadores expulsados y multas pendientes para varios de los involucrados.
¿Cómo se vivió el partido en el SoFi Stadium?
El partido divisional correspondiente a la AFC Oeste tenía un gran peso para ambos equipos, ya que iniciar la temporada con una victoria en su división es crucial para obtener ventaja en las estadísticas.
Los Chargers, liderados por el entrenador Jim Harbaugh, debutaron con un rendimiento sólido tanto a la ofensiva como a la defensiva. A pesar de la dura competencia, el equipo angelino mantuvo el control durante la mayor parte del encuentro.
Tras un importante touchdown en la parte final del partido, los Chargers intentaron una conversión de dos puntos para ampliar su ventaja a 14 puntos. Aunque no lograron llevar el balón a la zona de anotación, fue en esa jugada donde las tensiones se desbordaron y el partido tomó un giro inesperado.
¿Por qué se calentaron los ánimos en el campo?
Al concluir la jugada, dos receptores de los Chargers y dos esquineros de los Raiders continuaron bloqueándose fuera de los límites del campo. Lo que comenzó como una serie de empujones normales en el fragor del partido, rápidamente escaló a algo más serio. Los jugadores dejaron de lado los bloqueos y se enfrascaron en una pelea que no tardó en atraer la atención de sus compañeros de equipo y de los oficiales.
La situación se descontroló cuando varios jugadores de ambos equipos se unieron a la trifulca. Lo que debió ser un final tranquilo para los Chargers se convirtió en un caos en el campo de juego. Los oficiales se vieron obligados a intervenir rápidamente para evitar que la pelea escalara a mayores consecuencias.
¿Cuáles fueron los castigos?
Después de varios minutos de tensión y tras separar a los jugadores, los árbitros determinaron que el esquinero de los Raiders, Jack Jones, y el receptor de los Chargers, Joshua Palmer, fueron los principales involucrados en la pelea. Ambos jugadores fueron expulsados del partido.
Aunque el incidente no afectó el resultado final del partido, ambos equipos tendrán que lidiar con las consecuencias en los próximos días. Se espera que tanto Jones como Palmer enfrenten multas por parte de la NFL, ya que la Liga es estricta en cuanto a las peleas en el campo. Además, podría haber más sanciones para otros jugadores que participaron en la trifulca.
¿Qué le espera a Raiders y Chargers?
A pesar de la controversia, los Chargers celebraron su primera victoria bajo la dirección de Harbaugh, un inicio prometedor para un equipo que aspira a competir en los playoffs. Sin embargo, ahora tanto jugadores como entrenadores deberán enfocarse la Semana 2.
Por su parte, los Raiders deberán aprender de esta derrota y buscar mejorar su disciplina en el campo si quieren ser competitivos en una división que se perfila como una de las más duras de la NFL.
Los Raiders viajarán al Baltimore para enfrentar a los Ravens el próximo domingo 15 de septiembre; mientras que los Chargers ese mismo día tendrán la misión de visitar a los Panthers.
En las gradas también se calentaron los ánimos
La tensión dentro del emparrillado también se traslado a las tribunas, donde algunos aficionados decidieron resolver sus diferencias a golpes, hecho que circulo en las redes sociales:
