No importa quién esté en el banquillo, no importa el estadio o el rival, Cruz Azul siempre encontrará la forma de autosabotearse. Esta noche, frente a Xolos en el estadio Caliente, no fue la excepción.
Sí, La Máquina derrotó (2-3) a Tijuana e hiló su segunda victoria; sin embargo, de tener controlado el partido en el primer tiempo, los celestes mostraron otra cara en la segunda mitad y sufrieron de verdad.
En la primera parte, los de la Noria se fueron al descanso con una cómoda ventaja de tres goles. Luka Romero con su primer tanto en México al minuto 6, Giorgos Giakoumakis (33’) y Rodolfo Rotondi de penalti (45’), tenían arriba a los capitalinos.
Para el segundo tiempo, los de Juan Carlos Osorio se fueron al frente y Cruz Azul mostró la otra cara que ha presentado en esta primera etapa del torneo Clausura 2025. Un ambivalente cuadro cementero.
Iván Tona al minuto 64 y al 69’, José Zúñiga, acercaron a los fronterizos. El estadio Caliente despertó mientras el desconcierto invadía el banquillo de Cruz Azul. Los fantasmas de siempre otra vez.
De los eufóricos festejos de Vicente Sánchez y Joel Huiqui, a las caras largas y la amargura por perder el control que tenían.
Tijuana empató el encuentro a segundos del final, pero el gol fue invalidado por un supuesto abandono del balón previo al centro de Efraín Álvarez, quien sirvió para Zuñiga. Polémica en la Frontera que salvó a La Máquina.