En el momento justo, en el último suspiro, llegó la pierna derecha de Edson Álvarez que hizo vibrar a las más de 70 mil almas en el Azteca.
El jugador del West Ham se la encontró en el área chica y sin pensarla, le pegó para vencer al portero Edrick Menjívar.
Lee también México, entre la polémica, logra la hazaña ante Honduras en los penaltis
Tanta era la euforia que realizó un tremendo salto para festejar el empate 2-2 y enviar el partido a los tiempos extras.
A pesar de recibir un cartón amarillo desde los primeros minutos, no dejó de luchar, de buscar el balón y defender su defensa como un auténtico soldado.
Mientras El Capitan del conjunto Tricolor atacaba, sus guardianes; César Montes, Jesús Gallardo, Johan Vásquez y Jorge Sánchez, le cubrían la espalda. Pero cuando bajaba a defender la muralla era impenetrable.
Incluso, antes de la tanda de penaltis, fue con el árbitro para exigir el cambio de portería, ya que donde se iban a tirar estaba dañado el césped.