De nueva cuenta el futbol mexicano fue manchado por la violencia. Pese a los intentos por evitar este tipo de situaciones en las canchas, los golpes y la tensión surgió en un partido de la jornada 29 de la Liga Premier del balompié mexicano.
Los protagonistas fueron jugadores de los Reboceros de La Piedad y de los Petroleros de Salamanca, quienes convirtieron el césped del estadio Juan Nepomuceno López, casa del conjunto michoacano, en un cuadrilátero de boxeo en pleno partido.
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Los ánimos se calentaron a tal grado que las acciones del partido tuvieron que llegar a su final, con un saldo de varios jugadores golpeados, entre ellos el portero de los Petroleros, Axel Quiroz, quien tuvo que ser atendido en una ambulancia tras haber sido controlada la trifulca.
¿Cómo se desató la batalla campal?
Corría el minuto 73 del encuentro entre Reboceros y Petroleros, cuando el marcador iba dos goles a cero a favor del conjunto visitante. Fue el guardameta del equipo guinda quien perdió la cabeza y realizó una fuerte agresión sobre John Rodríguez, atacante del cuadro rival, al cual mandó contra el césped tras propinarle un codazo en el rostro mientras salía con el balón.
De inmediato el árbitro central se fue contra el arquero de la escuadra de Salamanca para mostrarle la tarjeta roja; sin embargo, la calentura llegó a su punto máximo, pues el propio Axel Quiroz de inmediato intercambió golpes con Iván Zarate, de Reboceros, mientras que jugadores de Petroleros y de la banca local participaban en la bronca.
¿Quién se llevó la peor parte?
El portero de Petroleros fue el que se llevó la peor parte, ya que luego de comenzar el pleito, recibió varios golpes de elementos de los Reboceros, al tal grado que tuvo que recibir las asistencias médicas por el abundante sangrado en su nariz.
Tuvieron que pasar alrededor de 40 minutos desde que se desató el enfrentamiento campal antes de que el cuerpo arbitral decidiera suspender el partido al dictaminar la falta de garantías para poder reanudar el cotejo, ya que también se registró el ingreso a la cancha de algunos aficionados.