Esta noche los Pumas volvieron a caer frente al Seattle Sounders. No hubo revancha ni deuda pendiente saldada. Por el contrario, los universitarios fueron eliminados y humillados en los octavos de final de la Leagues Cup.
Un gol anulado les cambió el ánimo y no pudieron levantarse ante un Seattle que revivió una de las peores pesadillas de la afición felina en los últimos años.
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La superioridad no fue suficiente. Seattle quiso humillar a Pumas y lo logró dentro y fuera de la cancha. Paul Rothrock, Jordan Morris y Albert Rusnák fueron los verdugos de esta eliminación, pero en las gradas del Lumen Field los aficionados estadounidenses gritaron el "dos a cero" que tanto arde en el sentimiento mexicano.
El cántico se quedó corto ante el resultado final del partido. También la entrega displicente de los jugadores auriazules, que en lugar de sacar boleto a cuartos de final, tendrán que hacer sus maletas para regresar a México y pensar en el Apertura 2024.
Al final, Seattle le repitió la dosis que en la final de la Concachampions hace dos años y con un contundente 3-0, firmó otro episodio gris en la historia de Pumas.