México y Alemania se volverán a ver las caras este martes en el Lincoln Financial Field de Philadelphia, en una nueva edición de una rivalidad que ha dejado 10 encuentros entre ellos y grandes momentos, principalmente en Mundiales.
La selección teutona llega al encuentro con una victoria por goleada ante Estados Unidos, en lo que fue el debut de su técnico, Julian Nagelsmann. La Selección Mexicana, por su cuenta, viene de mostrar su mejor versión ante un rival de calidad como Ghana, donde obtuvo el triunfo por 2-0, con goles de Hirving Lozano y Uriel Antuna.
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Precisamente Hirving 'Chucky' Lozano fue el gran protagonista del último duelo entre mexicanos y teutones, luego de anotar el gol del triunfo de México ante la entonces campeona del mundo, en un momento inolvidable para la afición tricolor, que veía por primera vez a su selección ganarle a Alemania en Mundiales.
Con este triunfo, se puede entender que comenzó la gran depresión que arrastra incluso actualmente la selección teutona, luego de quedar eliminada dos veces consecutivas en las Copas del Mundo y desplegar un pobre futbol, que ya se ha cargado a Joachim Low y a Hansi Flick.
En la única ocasión que México alcanzó el quinto partido en un Mundial, se enfrentó a la que fue finalista, Alemania. La Selección Mexicana se quedó muy cerca del triunfo, luego de sufrir la anulación de un gol de Francisco Javier 'Abuelo' Cruz en tiempos extras. Al final, el encuentro finalizó 0-0 y en la tanda de penaltis, donde Alemania se impuso por 4-1.
Años después, algunas polémicas surgieron alrededor de ese encuentro. Primero, la salida de Bora Milutinovic, por Miguel Mejía Barón, que dejó en el banquillo a Hugo Sánchez ante Alemania. Después, el propio Bora aseguró que México habría avanzado si hubiera habido VAR en ese encuentro.
Luis 'Matador' Hernández pasó de héroe a villano, luego de adelantar a México en los Octavos de Final del Mundial de Francia 1998 ante la Manschaft; sin embargo, luego de perdonar el segundo tanto, que podía haber acercado a la tricolor a Cuartos, Jurgen Klinsmann y Oliver Bierhoff marcaron hacia el final del partido para darle a Alemania el pase a la siguiente ronda.
En una selección teutona, que estaba plagada de estrellas, se preparaba para recibir en 2006 la Copa del Mundo, luego de perder la Final del 2002 ante Brasil; sin embargo, ni en Copa Confederaciones, ni en su propio Mundial pudieron coronarse.
En 2005, en la Copa Confederaciones, enfrentó a México para luchar por el bronce, dejando un partido espectacular, definido en tiempos extras con gol de Michael Ballack, super estrella de ese combinado bávaro.