Los árbitros Marco Antonio Ortiz Nava y Luis Enrique Santander han sido inhabilitados para participar en el torneo Apertura 2024 de la Liga MX
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Ambos árbitros estarán limitados a colaborar en las funciones del VAR, lo que no les permitirá tener el mismo protagonismo que en los partidos como árbitros centrales.
Una vez que se tome la decisión de que puedan regresar al terreno de juego, deberán someterse a las pruebas físicas exigidas por la FMF y la Comisión de Árbitros, que evaluarán si están en condiciones óptimas para regresar a la acción en la Liga MX.
Ambos nzarenos no superaron las pruebas físicas requeridas por la Federación Mexicana de Futbol (FMF) y la Comisión de Árbitros.
Ambos árbitros presentaron problemas físicos que les impiden impartir justicia en el terreno de juego como árbitros centrales o cuartos oficiales, lo que representa un duro golpe para la estructura arbitral del futbol mexicano.
Luis Enrique Santander sufre una distensión en el isquiotibial y una inflamación de un tendón cercano al bíceps femoral de su pierna izquierda.
Este tipo de lesión muscular es habitual en deportistas de alto rendimiento, especialmente en aquellos que requieren cambios bruscos de velocidad y movimientos intensos, como es el caso de los árbitros en un partido de futbol.
Esta lesión lo alejará de los terrenos de juego hasta que su recuperación sea completa y pueda volver a someterse a las pruebas físicas.
Mientras tanto, Santander únicamente podrá participar en las funciones de VAR (Video Assistant Referee), un recurso tecnológico implementado en los últimos años para mejorar la toma de decisiones en los encuentros, pero que limita su actuación en cancha.
Por otro lado, Marco Antonio Ortiz, quien anteriormente fue nombrado mejor árbitro del Clausura 2024, también fue inhabilitado debido a una sobrecarga muscular en la pantorrilla de su pierna derecha.
Ortiz ha sido uno de los árbitros recurrentes en los partidos de la Liga MX, habiendo protagonizado la polémica en la última final entre América y Cruz Azul. Sin embargo, esta lesión lo mantiene fuera de las canchas por tiempo indefinido, hasta que su condición física sea evaluada nuevamente.
Tras su inhabilitación, ambos silbantes podrán colaborar en el VAR. Tanto Ortiz como Santander están sujetos a un proceso de rehabilitación y recuperación, cuyo tiempo dependerá de la evolución de sus respectivas lesiones.
Su eventual retorno dependerá de su recuperación y de la evaluación médica que determine si pueden retomar su lugar en los terrenos de juego.