México hizo el ridículo frente a la Selección de Honduras, en el duelo de ida de los cuartos de final de la Nations League. Derrota (2-0) que desnudó deficiencias que siguen apareciendo en el equipo de Jaime Lozano.
El próximo martes en el Estadio Azteca el cuadro nacional buscará su boleto a la ronda de semifinales y de paso asegurar su lugar en la Copa América 2024. Luce un escenario complicado para el equipo mexicano.
Lee también Ricardo Salinas Pliego reventó a la Selección Mexicana: 'Que se les pague por resultados'
La lesión de Guillermo Ochoa. El cambio obligado al minuto 21 y perder a tu líder en el terreno de juego, fue un golpe en lo anímico.
La falta de ambición del equipo mexicano se notó en los 90 minutos. No dieron ese plus que se había notado desde la llegada de Jaime Lozano al banquillo tricolor.
Poca capacidad de reacción. Luego del 1-0 de Anthony Lozano, la Selección Mexicana se cayó mental y futbolísticamente. Su creación de juego fue nula y las llegadas de peligro nunca existieron en el arco catracho.
Pésimo juego de la zaga tricolor, la cuál se espera que siga siendo la más utilizada por Jaime Lozano durante su proceso.
Tarea complicada rescatar algo bueno después de la derrota de México en el Estadio Nacional, pero podría haber cosas plausibles a pesar del descalabro.
El debut de Julián Quiñones. Aunque no fue lo esperado y el escenario fue complicado, al fin pudo debutar con el equipo mexicano.
La autocrítica al término del partido. Tanto Edson Álvarez como Jaime Lozano, Hirving Lozano y Guillermo Ochoa, fueron autocríticos con su actuación. Enfatizaron en la falta de ambición y lo débil que se mostraron como equipo mentalmente.
Fueron 12 jugadores que visitaron por primera vez Honduras para un encuentro oficial con la Selección Mexicana; ganaron experiencia varios elementos jóvenes, mientras los de más experiencia demostraron optimismo de cara al encuentro de vuelta en el Coloso de Santa Úrsula.