Parecía que Chivas volvería a sonreír, pero en la agonía del partido, Rayados le arrebató la victoria y se tuvo que conformar con un empate en casa.
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Igualada (1-1) que sabe a derrota para un Rebaño que tuvo oportunidades de ampliar la ventaja, pero la mala contundencia volvió a cobrarle factura.
Aunque siguen invictos en casa, este triunfo pudo meterlos a la zona de Liguilla directa, pero ahora tendrán que esperar y seguir en los puestos de Play-In.
El momento más controvertido del primer tiempo ocurrió al minuto 9, cuando Lucas Ocampos, delantero de Monterrey, envió el balón al fondo de las redes.
Sin embargo, la jugada fue revisada por el VAR y el tanto fue anulado debido a una falta en ataque.
Esto desató la molestia de los jugadores regiomontanos y generó una ola de comentarios entre la afición. El gol anulado pareció afectar el ánimo de los visitantes, quienes, pese a sus intentos de empatar, no lograron concretar sus oportunidades.
En la jugada, el balón parecía retenido entre la mano del portero Raúl 'Tala' Rangel y el césped, es decir ya estaba en posesión del guardameta de Chivas, y por consiguiente, Lucas Ocampos ya no podía jugar el balón.
Ricardo Marín, que entró de cambio por Armando González (lesión), abrió el marcador (28’) luego de un soberbio pase de Roberto Alvarado. Algarabía total en el Akron.
No sé veía por dónde. Los de Martín Demichelis lucían inoperantes, pero un error de Raúl Rangel les abrió la puerta. El arquero de las Chivas, en una mala salida, dejó el baló a Jesús Corona para empatar el marcador al 88’.
Doloroso empate para unas Chivas que siguen sufriendo en los partidos y a falta del partido de su acérrimo rival, podría caer otro lugar en la clasificación.
Para la siguiente jornada, Monterrey visita al Atlético de San Luis, mientras que el Guadalajara recibe al Atlas, en una edición más del Clásico Tapatío.