Este domingo 10 de noviembre, la actividad del torneo regular del Apertura 2024 llegó a su final para dar paso a la fase de Play In y Liguilla. Sin embargo, más allá de los resultados que se dieron en la última jornada del campeonato destacó la intensidad con la que se jugó en el terreno de juego.
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Esa misma pasión no sólo se limitó a las acciones del Máximo Circuito del futbol mexicano, también en la Liga de Expansión la pasión llegó a salirse de control en uno de los juegos de la Liguilla.
Todo comenzó con el duelo de Vuelta de los Cuartos de Final entre Atlante y Dorados, de la Liga de plata del balompié nacional.
En dicho partido, los de Sinaloa llegaron al Estadio Hidalgo, casa temporal de los Potros de Hierro, con la ventaja en el marcador global de 3-1. No obstante, el cuadro azulgrana logró revertir el marcador para avanzar a la siguiente fase, donde se enfrentarán al Celaya.
Ante la frustración por el partido, el jugador de Dorados, Alfonso Sánchez, perdió el control durante la segunda mitad del partido y propinó un cabezazo al rival Max García tras una jugada ríspida que motivó que el árbitro le mostrara la segunda tarjeta amarrilla y por ende la roja.
Todo pudo haber quedado en una expulsión, pero el jugador de los Potros fue a reclamarle a Sánchez por la acción y recibió un cabezazo en la frente. Al final también se fue a las regaderas.
Ya en la actividad de la Jornada 17 del Apertura 2024 de la Liga MX, el duelo entre Rayados y La Fiera también tuvo sus momentos de máxima ebullición en el Gigante de Acero. Y es que cuando los regios ya se habían puesto adelante en el marcador 2-1, vinieron un par de jugadas que motivaron que varios jugadores e integrantes del cuerpo técnico se fueran temprano a los vestidores.
Primeramente, El jugador de La Fiera, Édgar Guerra, se barrió con fuerza sobre Lucas Ocampos, de Monterrey, provocando que este último rápidamente se levantara y buscara encararlo. Luego de un par de empellones, hasta un volado de zurda pasó cerca del elemento de La Fiera.
Jugadores de ambos equipos intervinieron para evitar una pelea mayor, pero la intensidad en el campo resultó en la expulsión de ambos futbolistas.
Lucas Ocampos se volvió como loco, se quería comer vivo a su rival, al grado que varios compañeros tuvieron que agarrarlo impedir que se le fuera encima a Guerra. Al final, se perderá el duelo ante Pumas por los Cuartos de Final del Apertura 2024.
Cerca del final del mismo partido entre Rayados y el León, el colombiano John Steven Mendoza protagonizó un altercado con un aficionado del Monterrey, tras un berrinche infantil de parte del futbolista.
Antes del silbatazo final, el cafetalero reclamó duramente una jugada al árbitro César Ramos Palazuelos, y al parecer acompañó la queja de alguna palabra altisonante, por lo que el silbante le mostró el cartón rojo.
Pero lo peor vino después. Cuando Mendoza abandonaba el terreno de juego pateó un balón en dirección al acceso a los vestidores, incluso la pelota golpeó a algunas de las personas que estaban paradas en el sitio.
Esta situación generó el estruendo del estadio y la reacción de un aficionado, quien en respuesta lanzó un vaso con líquido en dirección al jugador, que de inmediato se dirigió hacia la grada para enfrentar al fanático.
Afortunadamente, la seguridad impidió que la situación escalara a mayores y se llevaron al futbolista de la Fiera a los vestidores.
El último juego de la Jornada 17, entre los Xolos y el Puebla, también registró un incidente en la segunda mitad del partido.
Al minuto 60, varios jugadores de ambos equipos se enfrascaron en una discusión acalorada que incluyó varios empujones y uno que otro manotazo; sin embargo, los que llamaron la atención fueron Rafael Fernández, de los fronterizos, y Jorge Rodríguez, por los poblanos; quienes en medio de la tensión se tomaron de donde pudieron como gallitos del pelea.
Al final el árbitro central sólo repartió tarjetas amarillas. a varios jugadores que participaron en el conato de bronca.