En un festejo que quedará para la historia, el América no olvidó enviar un mensaje contundente a su eterno rival, las Chivas de Guadalajara.
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El pasado domingo, en el estacionamiento del Estadio Azteca, los azulcremas celebraron su Tricampeonato, un logro que los ha colocado en los libros de récords del futbol mexicano.
Sin embargo, uno de los momentos de la celebración que más resonó entre la afición no fue solo el levantar de los trofeos, sino un mensaje que se convirtió en el eco de la euforia.
Pasado más de un mes desde que consiguieron su título número 16 de la Liga MX, y con el Clausura 2025 ya en marcha, América decidió celebrar a lo grande.
La música de 'Fiesta en América' llenaba el ambiente, pero fue un grito, captado por los micrófonos y escuchado por miles, lo que realmente encendió a los presentes.
"A chin... a su madre las Chivas", resonó una voz desde el escenario, sin que se pudiera identificar claramente quién fue el autor de estas palabras.
La afición, lejos de mostrarse sorprendida, respondió con entusiasmo, celebrando este insulto dirigido a su acérrimo rival, mismo que quedo grabado en un video compartido por el Diario Récord.
Los jugadores y el cuerpo técnico siguieron con la celebración, levantando los trofeos y agradeciéndole a los aficionados su incondicional apoyo.
Desde los primeros minutos después del incidente, comenzaron a surgir especulaciones y rumores sobre quién podría haber sido el responsable de tal declaración. Sin embargo, las imágenes y videos del evento no permiten identificar claramente al individuo, dejando en el aire si fue un jugador, miembro del staff o alguien más vinculado al club.
Con un recorrido por periférico sur, avenida del Imán y Circuito Azteca, los azulcrema recorrieron las calles mientras eran vitoreados por toda la afición americanista; al llegar al Coloso de Santa Úrsula, a las 20:00 horas, la fiesta estalló ante los miles de seguidores que esperaban por su arribo.
Uno a uno fueron bajando del turibus mientras los fanáticos coreaban su nombres; otros que también hicieron el recorrido fueron los equipos de amputados y débiles visuales que también forman parte de la institución capitalina.
Los jugadores, arriba del autobús firmaban playeras, ondeaban banderas y hasta bebian cerveza, porque la fiesta lo ameritaba. Al llegar al escenario, un coro de niños entonó el himno del América y la locura de los seguidores era máxima.