Apenas a los 5 minutos de haber iniciado el partido, Guillermo Ochoa se vistió de héroe para salvar a la Selección Mexicana en la Final de la Nations League de la Concacaf frente a Estados Unidos.
El meta mexicana ahogó el grito de gol estadounidense luego de un soberbio achique que impidió la primera anotación del partido.
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Cristian Pulisic quedó mano a mano contra el histórico guardameta y al intentar mandar el esférico por arriba de Ochoa, se estrelló en la mano de Paco Memo.
El AT&T Stadium, vestido de color verde y con una gran invasión de afición mexicana, gritó la atajada como un gol Tricolor. México se había salvado del primer golpe estadounidense.
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Hasta ese momento, había sido la única llegada de peligro en el arranque del encuentro, mismo que domina Estados Unidos en el lujo estadio de los Vaqueros de Dallas de la NFL.
