Previo a que se realizara el partido entre y Chivas, partido correspondiente a la Jornada 9 del Apertura 2024, se realizó un homenaje a la leyenda de La Maquina, Miguel Marín.

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Con un mosaico con líneas en azul y blanco se recordó al portero cementero. En el centro se apreció el escudo del club. Todo esto pasó mientras los jugadores de ambos equipos saltaban al terreno de juego.

Jugadores de Chivas y Cruz Azul saltan a la cancha con el mosaico de fondo. FOTO: Imago7
Jugadores de Chivas y Cruz Azul saltan a la cancha con el mosaico de fondo. FOTO: Imago7

Este homenaje fue realizado en alusión al uniforme que usaba “Súperman” Marín en la década de los 70’s.

Así se apreció el mosaico celeste. FOTO: Édgar Enríquez
Así se apreció el mosaico celeste. FOTO: Édgar Enríquez

Cuando Miguel cubría la portería celeste, salía con un jersey con líneas horizontales en azul y blanco.

Miguel Marín. FOTO: Especial
Miguel Marín. FOTO: Especial

Así fue homenajeado el cinco veces campeón con Cruz Azul. Para este duelo, La Máquina llegó con el objetivo de seguir como líder, no dejar escapar puntos de local y darle alegría a sus aficionados, mientras que Chivas vino a mantener su racha positiva de triunfos.

¿Quien fue Miguel Marín?

Miguel Marín, conocido como "El Gato" y el "Supermán" fue un famoso futbolista argentino que destacó como portero. Nació el 15 de mayo de 1945 en Río Tercero, Argentina, y se convirtió en una leyenda del futbol mexicano.

Inició su carrera profesional en el Vélez Sarsfield, equipo de la liga argentina, donde tuvo destacadas actuaciones.

En 1971, fue fichado por el Cruz Azul, equipo de futbol mexicano, donde se convirtió en una figura icónica. Jugó con el club desde 1971 hasta 1981, siendo parte fundamental de la llamada "Máquina Celeste", una de las épocas más gloriosas del club. Ganó cinco títulos de liga con Cruz Azul, y es considerado uno de los mejores porteros en la historia de la liga mexicana.

Marín era conocido por su agilidad y reflejos. Fue un pionero en la forma moderna de atajar, introduciendo acrobacias y estilo espectacular para detener balones.

Marín se retiró en 1981, y su contribución al fútbol mexicano lo hizo merecedor de un lugar en el corazón de los aficionados celestees. A pesar de ser extranjero, es recordado como uno de los mejores porteros que ha jugado en México.

Falleció el 30 de diciembre de 1991, a los 44 años, pero su legado sigue vivo entre los seguidores del fútbol mexicano, especialmente los aficionados de Cruz Azul.

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