Es el de menores cuidados y basta con baño y cepillado regular para mantenerlo. No se cae mucho y puedes encontrarlo en perros tipo daschund o salchicha. (Foto: Pablo Villalon en Pixabay)
Puede ser grueso o sedoso como el setter o spaniel. También lo identificas en pastores alemanes. (Foto: Katrina_S en Pixabay)
Redacción
Es común en la raza de los terriers. Requiere de un buen cepillado para desenredarlo. (Foto: antschabaer en Pixabay)
Redacción
Es típico en el poodle o bichón frisé. Se trata de rizos gruesos o suaves que crecen rápido pero tienen a enredarse. (Alexas_Fotos en Pixabay)
Redacción
Es común en doberman y boxers. Está entre los más sencillos de cuidar y mantener porque no requiere cepillado frecuente. (Foto: Jens Lanckman en Pixabay)
Redacción
Necesita un cepillado diario pero moderado y puedes observarlo en el Golden retriever. (Foto: Chiemsee 2016 en Pixabay)
Redacción
Aunque son ideales para personas con alergias, requieren cuidados especiales porque su piel queda expuesta a radiación solar, frío y calor. (Foto: de10mx)