Alejandro "Papu" Gómez, campeón del mundo con la selección argentina en 2022, atraviesa un momento crucial en su carrera. A los 35 años y tras recibir una suspensión de dos años por doping, el jugador busca mantenerse en forma mientras espera regresar al fútbol profesional en octubre de 2025. Actualmente entrena con el AC Renate, un club de la Serie C italiana, aunque sin firmar contrato oficial.
Alejandro "Papu" Gómez agradeció al equipo por ofrecerle un espacio que le permite mantenerse activo. Su objetivo es cerrar su trayectoria de manera competitiva y dejar atrás la controversia que lo alejó de las canchas. En sus redes sociales, el mediocampista expresó su compromiso con seguir preparándose, mientras analiza posibles ofertas para reinsertarse en las grandes ligas el próximo año.
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El doping positivo que lo marginó fue detectado en un control de la UEFA en noviembre de 2022, cuando jugaba para el Sevilla. Según Alejandro "Papu" Gómez, el resultado se debió al consumo accidental de terbutalina, un medicamento para la tos que tomó por error al utilizar un jarabe de su hijo menor.
La noticia le llegó dos días antes de la final del Mundial contra Francia, lo que describió como “horrible” y decidió no compartirlo con sus compañeros para no distraerlos antes del partido más importante de sus carreras. “Me enfermé, estuve con fiebre, pero decidí guardármelo para no afectar a mis compañeros. No quería que nadie pensara en otra cosa que no fuera jugar la final del mundo”, explicó en una entrevista reciente.
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La sanción de dos años, revelada casi un año después, le impide cualquier actividad relacionada con el deporte, lo que frustró incluso su intención de cursar estudios como entrenador. En cuanto a su presente, Alejandro "Papu" Gómez reflexiona sobre el impacto emocional de la sanción y el fin de su etapa como figura destacada: “El personaje del Papu Gómez está dejando de existir. Ahora convivo con Alejandro, el padre de familia”. Sin embargo, sigue aferrado al sueño de volver al fútbol competitivo y demostrar su valía antes de despedirse definitivamente del deporte que lo consagró como campeón del mundo.