El sueño se esfumó para Javier Aguirre, técnico del Mallorca. La oportunidad de conquistar la Copa del Rey le fue arrebatada por el Athletic de Bilbao, el segundo equipo con más títulos coperos (24).
El Vasco y su equipo cayeron en penaltis (4-2) luego de un empate a un gol en los 90 minutos, pero a partir de mañana “se acabó el tiempo de lamentarse”. Aguirre ya piensa en el Real Madrid, su siguiente rival en la Liga.
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“Hoy los dejaré que lloren en el regazo de su familia o con el compañero, que se diviertan un poco, que se tomen un par de cervezas, que asimilen la derrota porque duele, pero mañana los quiero bien ya y tenemos cuatro días para preparar el partido contra el Real Madrid”, declaró el mexicano.
Aguirre habló con sus futbolistas al término de la Final en el estadio La Cartuja, en Sevilla y les pidió que levantaran la cabeza y se sintieran orgullosos de lo conseguido en una impensable Copa del Rey.
“Les dije que la cabeza y la frente alta. Somos una familia y dimos lo que tenemos, no tenemos más y es suficiente. Nos permite estar en Primera División, nos permite competir contra el que sea”, agregó el exfutbolista.
Al término de la campaña en España, Javier Aguirre será libre. Sin embargo, también podría haber una renovación con el Mallorca.
“En este momento estoy centrado en LaLiga. Tengo un calendario bastante fuerte y no tengo tiempo para pensar en otra cosa que no sea la Liga, la permanencia y tratar de cerrar bien el año”, respondió sobre su futuro.
Javier Aguirre también ha sonado para llegar a la Selección Mexicana, pero no como director técnico, sino en un puesto directivo.