El Gran Premio de México 2024 fue escenario de una polémicas que encendió los ánimos dentro y fuera del Autódromo Hermanos Rodríguez.
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En la vuelta 18 de la carrera, el piloto mexicano Sergio Pérez y el neozelandés Liam Lawson protagonizaron un incidente que prendió a los aficionados del volante tricolor.
En una maniobra de rebase en una de las curvas de la pista de la Magdalena Mixihuca, ambos autos se tocaron, desatando un conflicto que no terminó ahí.
El roce entre los monoplazas no solo afectó el rendimiento de ambos pilotos, sino que también derivó en una penalización para Checo, quien no dudó en expresar su desacuerdo.
Al finalizar la carrera, 'Checo' cuestionó la forma de llevar la carrera de Lawson en la pista.
El mexicano descendió hasta la posición 17, el último lugar de la carrera, luego de que otros pilotos como Yuki Tsunoda, Alex Albon y Fernando Alonso quedaran fuera de la competencia.
La tensión aumentó cuando en redes sociales comenzó a circular un video que capturó un momento de alto voltaje: durante un rebase, Lawson hizo un gesto obsceno a Pérez, lo cual enfureció a los fanáticos del mexicano.
La seña fue vista como una falta de respeto y rápidamente se viralizó, generando una ola de críticas hacia el piloto neozelandés.
Sin embargo, otro de los momentos más crítico llegó al finalizar la carrera. Un segundo video mostró a 'Checo' y Lawson fuera de sus monoplazas, sin cascos, en una conversación tensa y visiblemente acalorada.
Las imágenes, que también muestran a George Russell, piloto de Mercedes, observando de cerca el intercambio de palabras, hicieron que muchos especularan si la situación estuvo a punto de escalar a un enfrentamiento físico.
Aunque no llegaron a los golpes, la discusión entre ambos dejó en claro que la rivalidad va más allá de la pista y ha dejado una marca en el Gran Premio de México.