Aunque ya tiene amarrado el subcampeonato del mundo, a falta de una carrera y con todo y esas grandes batallas que ha regalado en los últimos Grandes Premios que se han disputado, Checo Pérez tuvo una severa crisis de resultados en la temporada que se reflejaron cada fin de semana en que subía al RB19.
Ya instalado en Abu Dhabi, el tapatío confesó en Pit Debrief el intenso trabajo que tuvo que hacer para salir de ese mal momento y ponerse de nuevo a punto.
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"Tuve un problema muy profundo en Qatar, luego volví a la fábrica durante una semana. Revisamos muy detalladamente con todos los ingenieros", destacó el de Guadalajara, que este 2023 vive su temporada 13 en la Fórmula 1.
Ya en Milton Keynes, Pérez aseguró que comprendió las situaciones que habían afectado a su desempeño en las competencias:
"Entendimos muchas cosas que no estábamos haciendo para compensar las debilidades que teníamos y probablemente estábamos adoptando el enfoque equivocado con el auto y tratando de compensar demasiado con la apuesta a punto del monoplaza".
Entonces el 11 de la parrilla pensó que era momento de soltar algunos compromisos para tener tiempo y dar un paso atrás para luego tener un avance positivo.
"Necesitaba tiempo, estábamos muy ocupados con los compromisos que teníamos en las carreras, el simulador, etc. Era importante dar un paso atrás y mirar realmente los detalles. Desde ese momento nuestra temporada se transformó por completo".