En marcha estaba la vuelta 39, con Safety Car y a unos metros de que comenzará la 40 y se relanzara la competencia ya sin el auto de seguridad. El mexicano Checo Pérez, con buen rendimiento y estrategia estaba en el quinto puesto, listo para volver a acelerar y buscar el podio; un problema en el auto se lo impidió y le hizo abandonar el Gran Premio de Qatar, el penúltimo del 2024.
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Neumáticos fríos y una falla en el motor le hicieron al 11 de Red Bull tener un trompo, caer hasta el último puesto y de paso, no tener potencia en el monoplaza. Al final, el de Guadalajara tuvo que bajar del RB20 y dejar a un lado la gran carrera que había hecho hasta entonces.
La incógnita era cuál había sido el motivo por el que Pérez perdió el auto, algo que él mismo explicó en el corralito, mientras de fondo una pantalla transmitía el momento en que Max Verstappen festejaba con el equipo la victoria en la carrera noctura de Qatar.
"Una pena (el abandono). Venía con los neumáticos duros y al poner el acelerador, saliendo de la curva, tuve un súper overdelivery (aceleración excesiva) del motor, el cual me hizo perder el auto y perdí el motor, a partir de ahí ya no lo pudimos recuperar", expuso, frustrado, el volante de Guadalajara.
Ese quinto puesto y el relanzamiento de la carrera tras el Safety Car, ponían a soñar a Pérez Mendoza con un nuevo podio en la Fórmula 1, pero nada de eso sucedió.
"Todo venía bien, veníamos para un súper resultado, podíamos pelear por el podium en esas últimas vueltas. Desafortunadamente acabamos perdiendo el motor y trompeando con ese all-delivery que cuando lo tuve, con esos neumáticos tan fríos, no pude controlar el auto".