Cuando se habla de las mujeres a las que amó Adolf Hitler, hay tres nombres que son recurrentes: el de su madre Klara Pölzl, su sobrina Geli Raubal y su amante Eva Braun. Sin embargo, hay otra mujer que no fue muy conocida, pero que sostuvo una relación intensa con el dictador alemán.
Maria Reiter fue una mujer que, siendo aún una adolescente de 16 años, conoció a Hitler, de 37 años, y ambos mantuvieron un romance secreto. Ella esperaba que el hombre que estaba a su lado le pidiera matrimonio, pero lo único que le propuso es que fuera su amante.
Cuando la Segunda Guerra Mundial terminó (1945), se hallaron dos cartas que Reiter le había escrito al líder alemán, las cuales son testimonio de su relación. Aquí en De10.mx te contamos toda la historia…
Richard Reiter, sobrino de Maria, reveló en entrevista con un medio internacional, que su tía se encontraba sentada en una banca de un parque de Berchtesgaden, su ciudad natal, cuando vio por primera vez al Führer. Los perros de ambos estaban jugueteando y fue a través de sus mascotas que hicieron contacto. Ella no se llevó una muy buena impresión del dictador alemán, sin embargo, aceptó asistir a uno de sus mítines políticos.
Días después, ahí se encontraba ella, en la gran sala del hotel Deutsches Haus, la cual lucía abarrotada. Cuando entró, el líder alemán interrumpió su discurso, acudió a ella, besó su mano y todos los presentes se quedaron con la boca abierta, incluida la propia Maria. Ese momento marcó el inicio de una relación intermitente y destructiva.
La pareja comenzó a frecuentarse, a dar largos paseos o hacer excursiones por las montañas de Berchtesgaden. Todo parecía color de rosa, pero cada vez eran más las obligaciones y compromisos políticos de Adolf Hitler, lo cual provocó que la pareja se distanciara y Maria se sumiera en una profunda depresión.
El 23 de diciembre de 1927, Maria cumplió 17 años y el político alemán la visitó de sorpresa; le llevó como regalo una edición de lujo de su libro Mein Kampf (Mi Lucha). En una entrevista concedida por la propia mujer en 1959, ella declaró que Hitler le pidió que fuera su amante, propuesta que le rompió el corazón, pues ella tenía la ilusión de casarse con él.
Poco a poco, Adolf Hitler se fue alejando de la joven al darse cuenta que esa relación podía perjudicar su imagen, algo que fue devastador para ella. En 1927 perdieron contacto por completo ella intentó quitarse la vida, pero su cuñado la salvó de morir ahorcada.
La joven trató de resignarse y para 1930 se casó con Fernand Woldrich, un hotelero de Berchtesgaden, pero ella seguía enamorada de Hitler y su matrimonio solo duró un año.
Ya divorciada, se acercó nuevamente al líder nazi. En 1934, Rudolf Hess, un lugarteniente del dictador, la ayudó a acercarse a él y la atracción resurgió. Hitler le reiteró la propuesta para que se convirtiera en su amante, pero ella le señaló que quería convertirse en su esposa. Él no quería casarse con ella, y menos ahora que estaba divorciada y que él se encontraba interesado en Eva Braun, a quien conoció en octubre de 1929.
(Eva Braun y Adolf Hitler. (Foto: AP)
Afligida y despechada, Maria Reiter se casó por segunda vez, ahora con un joven oficial de la SS, George Kubisch, quien murió en 1940, en la batalla de Dunkerque. Para expresar sus condolencias, Hitler le envió 100 rosas rojas.
Leer más: La difícil y traumática infancia de Adolf Hitler
El 30 de abril de 1945, Hitler mordió una cápsula de cianuro y se dio un tiro en la sien derecha, pero poco antes de que el político se suicidara, Maria le escribió dos cartas que fueron halladas tras el fin de la Segunda Guerra Mundial. Los textos, cuyo tono era íntimo y afectuoso, revelaban la relación que ambos tuvieron.
En 1959, Maria decidió vender su historia a la revista alemana Stern, donde afirmó que “Hitler se apartó de mí para evitar un escándalo. El partido nazi recibió una carta anónima que amenazaba con denunciar a Hitler a la policía por seducir a una menor”.
También reveló que tuvo relaciones sexuales con Hitler, que su comportamiento en la cama era de lo más normal, y que ella se había esterilizado porque Adolf no deseaba tener hijos. Finalmente, Reiter se casó por tercera vez con un oficial de la SS que sufría una discapacidad física llamado Walter Zierahn.
(Foto: Daily Mirror)
Con información de Guioteca y National Geographic.
No te pierdas de las últimas noticias de De10.mx en Google News, síguenos aquí.
Te compartimos este video sobre la bomba atómica: